El sector de la uva de mesa blanca sin semilla muestra una tendencia cada vez más clara. “El mercado se está dividiendo en dos segmentos muy diferenciados: el segmento premium con variedades con sabor y con una mayor durabilidad, donde el consumo es cada día más alto, y el resto de variedades sin semillas, que este año están sufriendo”, explica Graziano Defilippis, de Polar Fruit Europa, “ya que las variedades especiales toman cada vez más cuota de mercado frente a las tradicionales”.
“De hecho, se distinguen dos velocidades muy distintas en la comercialización; mientras los consumidores están comprando las tarrinas de 500 g de uva normal más lentamente respecto al año pasado, las uvas premium como nuestras Crunchy One y Sweeta se venden con gran rapidez. Y el aumento de los pedidos de los clientes con los que trabajamos en Europa, Aldi, Mercadona, Nufri y Grupo LG en España, Omelro en Portugal, Coop Norte y SOK en los países escandinavos, Banagrumes en París, Coop Italia en Italia y Edeka Alemania, lo confirma”.
Este año, Polar Fruit prevé comercializar 5 millones de kilos de su uva Blanc Seedless en Europa; 4,2 millones de kilos producidos por los españoles Moyca y Prieto, más 1,8 millones de kilos cultivados en Italia por parte de OP Giuliano. “En Polar Fruit Europa nos hemos asociado a productores muy grandes de países diferentes centralizando la venta de toda la nuestra uva Blanc seedless en una sola oficina comercial situada en Barcelona. Esa es la gran fuerza de una variedad como la nuestra: además de ser una fruta muy apreciada y de gran calidad, contamos con un brazo comercial muy robusto y podemos luchar por conseguir los precios más altos y una calidad más alta para los consumidores finales que compran nuestra uva, lo que se traduce en mayores retornos para nuestros productores”.
“Además, junto con las producciones de uva Blanc Seedless de nuestros productores en Perú y Chile, ofrecemos programas en Europa de hasta 8 meses de duración con una misma variedad (Sweeta & CrunchyOne) y con la misma calidad, algo que solo consigue Polar Fruit”.
Graziano Defilippis y Daniela Avendaño.
“Las ventas de uva con semilla están alcanzando mínimos históricos”
El sector de la uva de mesa ha experimentado grandes cambios en los últimos tiempos, en los que el considerable aumento de la oferta mundial y la nueva genética han generado nuevas dinámicas en la demanda y en un mercado cada vez más competitivo.
“El mundo de la uva va a cambiar de manera fuerte. Si los exportadores y productores medianos y pequeños no se asocian, no se unen en forma de cooperativas u organizaciones de productores para enfrentar esta situación en vez de competir entre ellos, muchas empresas van a desaparecer”, alerta Graziano. “Por ejemplo, vemos que el consumo de uva con semilla está cayendo. Hay mucha uva Italia y Doña María, entre otras, que están generando una gran fatiga en un mercado muy difícil en el que las ventas están alcanzando mínimos históricos, mientras los costos han subido un 20%-30%”. Y los agricultores son los principales perjudicados en este escenario, subraya Graziano, en el que los supermercados –en el mejor de los casos– han aumentado sus precios tan solo un 5%.
“En Polar, la unión es nuestra gran fuerza. Hemos conseguido lo que nadie ha conseguido en el sector de la uva de mesa: unir bajo una misma variedad una marca y a través de una misma oficina comercial a varios de los mayores productores de uva de Italia y España. Gracias a ellos podemos garantizar una uva de una gran calidad en el mercado, y la demanda cada vez mayor nos está dando la razón. El mayor feedback que podemos tener es la venta de nuestro producto y que nuestros clientes nos pidan cada vez más volúmenes de nuestras uvas Crunchy One y Sweeta”.
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Graziano Defilippis
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