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Cómo aumentar y homogeneizar el calibre en el cultivo de lechuga desde el suelo

“Ser agricultor a día de hoy es todo un reto. Y ser agricultor en zonas productoras como la de Murcia, en condiciones de aridez, déficit de agua y salinidad en el suelo, es más que un desafío”, cuenta Silvia Madrueño, Marketing Manager de Symborg para España y Portugal, quien señala que “para producir más y mejor, respondiendo a las demandas de consumo, exigencias normativas y de sostenibilidad, la biotecnología resulta una herramienta imprescindible”.

En Symborg trabajan desde y para la base del cultivo: el suelo. En concreto, la microbiota del suelo y su comunidad de microorganismos. “¿Cómo conseguimos cultivos más fuertes y con mayor calibre manteniendo la rentabilidad?”, plantea Silvia Madrueño. “Herramientas como los biofertilizantes, con función prebiótica y probiótica, que aplicados por separado y especialmente de manera conjunta, consiguen multiplicar la microbiota beneficiosa del suelo”.

“La confianza en nuestros productos es cuestión de cercanía con el agricultor, conocimiento científico y datos en campo sólidos. Por ejemplo, contamos con resultados en cultivo de lechuga, en suelo arcilloso, con salinidad media, elevada caliza activa y materia orgánica baja [1,63% (p/p)], comprobamos la eficacia Qlimax (prebiótico) en la solubilización de fosfato y fijación de nitrógeno, promoviendo hasta 3 órdenes de concentración de las poblaciones de Bacillus y Actinomycetes de la rizosfera. Estas poblaciones producen biomoléculas que mejoran el crecimiento de las plantas, la producción de vitaminas y otros compuestos relacionados con la formación del suelo”, nos traslada Silvia.

”Por otra parte, VitaSoil (probiótico) actúa como regenerador del suelo, garantizando una mayor eficiencia en el reciclaje de nutrientes de la solución del suelo y favoreciendo procesos fisiológicos clave como la floración, cuajado y maduración”, añade.

Se pueden usar de forma aislada o conjunta, aunque “la aplicación combinada de ambos productos nos permite homogeneizar calibres, lo que se traduce en mayores rendimientos. Esto puede permitir aprovechar mejor las ventanas comerciales, especialmente en periodos de frío”.

“La diferenciación en la producción es un factor clave en toda estrategia comercial. Conocer nuestro suelo y aplicar una estrategia a su manejo es fundamental para conseguirla”, concluye la Marketing Manager de Symborg.

 

Para más información:
Silvia Madrueño
Symborg Corporate, S.L
M. +34 623 298 287
O. +34 968 899 250
silviamadrueno@symborg.com 
www.symborg.com