La repentina bajada de temperaturas desde hace más de dos semanas en gran parte del territorio español está causando un serio desabastecimiento de hortalizas, tanto de campo abierto como de invernadero, así como de algunas frutas. En el caso de las brásicas, el descenso de la oferta es muy severo, sobre todo para el brócoli.
“En estos momentos aún nos encontramos a un 30% de la disponibilidad de brócoli que deberíamos tener en estas fechas y un 70% en el caso de la coliflor, que también parece estar recuperándose en Francia”, cuenta Nacho Doménech, consejero delegado de la empresa murciana productora y comercializadora Agromark. “Llevamos así al menos dos semanas, pero parece que a partir del jueves podría mejorar el tiempo y que las temperaturas diurnas empiecen a subir hasta los 20 ºC, pero no creo que vuelva a recuperarse el 100% de la oferta hasta entrada la primavera”, añade.
Cabe recordar que la superficie plantada de brócoli de invierno ha descendido, lo cual también contribuye a esta falta de oferta. “La escasez de agua para riego en Alhama de Murcia y Lorca ha influido en que se plante mucho menos brócoli. Por tanto, hasta que no lleguen las plantaciones de primavera en otras zonas como Cieza, vamos a tener una escasez de producto significativa”.
Desde que la oferta descendió, el aumento de precios ha sido muy importante. “Estamos teniendo precios como no recordamos haberlos tenido antes para el producto de venta al mercado libre, aunque no se trata de grandes cantidades y, por tanto, no compensan la falta de kilos. Solo en las subastas, el precio llega a los 1,70 € el kilo”, indica Doménech.
La mayoría de empresas del sector se han visto obligadas a reducir el suministro a sus clientes en un periodo de alta demanda, sobre todo en países como Reino Unido. “Lo retailers británicos nos pedían producto a cualquier precio, ya que se quedaban sin producto en los lineales habiendo subido el consumo entre un 15 y un 20%, según nos informan. Y es que en Reino Unido las hortalizas no han subido de precio en los lineales por la inflación como sí lo han hecho los huevos, la carne y el pescado”, recuerda. El invierno ha sido más frío de lo habitual en Reino Unido, lo que ha causado ciertos problemas en sus producciones de brócoli y coliflor, que se esperan escasas en los meses de primavera, lo cual nos dará a nosotros más oportunidades para vender a buenos precios”.
Hasta hace dos semanas, cuando empezó la ola de frío, llevábamos unas semanas de adelanto en la campaña debido a que el final del otoño y principio del invierno estaba siendo demasiado cálido y húmedo, lo cual ha causado también muchos problemas de Botrytis en el campo. No obstante, con el frío, esto se ha corregido.
Nacho Doménech avisa de que los altos costes de producción, la escasez de agua para riego por el recorte del transvase Tajo-Segura y las limitaciones derivadas de los problemas con el Mar Menor van a marcar el futuro de la disponibilidad de brócoli en Europa de cara a las próximas campañas:
“Los años de abundancia parecen haber pasado. Los discounters han mantenido los precios porque han puesto dinero de sus bolsillos con tal de continuar siendo competitivos, pero esto no es sostenible por mucho tiempo. El producto continuará encareciéndose porque los costes no paran de subir. De hecho, los precios podrían ser entre un 10 y un 15% superiores para la campaña que viene. Mientras tanto, la falta de agua hará que se reduzca la superficie de brócoli y coliflor notablemente y, realmente, apenas hay alternativas en otras zonas productoras en España ni fuera de ella en los meses de invierno”.
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Nacho Doménech
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