Mientras Brasil llora la pérdida de 65 personas a raíz de los letales aludes de lodo provocados por unas precipitaciones históricas de 682 mm de lluvia, las exportaciones de fruta no se han visto afectadas. Según Jorge de Souza, gerente técnico y de proyectos de la Asociación Brasileña de Productores y Exportadores de Frutas (Abrafrutas), tan solo la producción de fruta para el consumo interno se ha visto perjudicada.
La lluvia y los aludes de barro azotaron la región costera de Barra do Sahy, en São Sebastião, en el litoral norte del estado de São Paulo, el fin de semana del 18 y 19 de febrero. La semana pasada continuaban las labores de rescate y también se experimentaron cortes de suministro eléctrico e hídrico. Los equipos de rescate, junto con el Gobierno estatal, decidieron cambiar de método el fin de semana pasado tras el desplazamiento de miles de personas.
"La región que se ha visto afectada de gravedad por las lluvias no produce frutas para la exportación, tan solo para el consumo nacional. En resumen, la oferta de fruta no se ha visto afectada por la lluvia, solo la infraestructura como carreteras, casas, energía eléctrica, etc.", dice De Souza.
La otra parte del estado de State of São Paulo, sin afectaciones por los aludes de lodo, es donde se cultivan para la exportación bananas, aguacates, kakis, higos y mandarinas.
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Jorge de Souza
Abrafrutas
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