Hace unas semanas, las impactantes imágenes de estanterías vacías de hortalizas en Reino Unido daban la voz de alarma, aunque como confirma Juan Carlos Pérez, codirector de la Cátedra Coexphal-UAL, a Diario de Almería, “poco a poco se ha ido recuperando la normalidad. Se ve en cómo los precios han caído desde la octava semana. La bajada brusca de las temperaturas de esta última semana también puede afectar próximamente, pero será algo coyuntural. Ahora ya estamos produciendo las nuevas cosechas de primavera y comenzarán las exportaciones de melones y sandías. Por parte de Almería no va a haber ningún tipo de problemas”, aseguraba.
“¿Quiénes son los principales suministradores del Reino Unido?”, se preguntaba, analizando el origen del problema. “Almería es muy representativa en cuanto a pimiento, calabacín, berenjena, o productos de los cultivos de primavera. Sin embargo, en el caso del tomate, Almería (10%) ya no es el principal suministrador, tiene un porcentaje residual, sino que son Holanda (35%) y Marruecos (35%). En los últimos años ha cambiado el panorama completamente”.
Por ello, junto a las olas de frío de las últimas semanas, también hay que mirar a otros mercados productores, que han dejado de cumplir con sus compromisos, recordaba. “Para llegar a esta situación, confluyeron varias causas de forma genérica en el mismo momento. La principal está claro que fue el tema meteorológico. Nuestros productos son muy sensibles a estos cambios. Tanto aquí como en el norte de África produjo desajustes entre oferta y demanda”, pero a ello hay que sumar la inflación que está viviendo Marruecos: “La gente se está empezando a quejar y parte de la producción que se llevaba a los países limítrofes, se la están quedando en Marruecos, lo que ha provocado que caiga la oferta para intentar contener el aumento de precios de alimentos tan importantes como son las hortalizas”, explicaba Pérez.
“El precio al que se estaba pagando la hortaliza en origen no representaba el valor real”
En Europa los precios también experimentaron un incremento notable con el fin de los cultivos en el norte del continente y la bajada brusca de las temperaturas. “En la semana cinco se estaba buscando producto y no se encontraba. Esto hizo sobrecalentar el mercado en origen. Realmente, el precio al que se estaba pagando la hortaliza en origen, no representaba el valor real”, comentaba Juan Carlos Pérez.
Aunque han bajado ligeramente, los precios se mantienen altos, pero no hay que olvidar otras variables que serán determinantes esta campaña, como los altos costes de los insumos. “Hay que estar pendientes también de la primavera, que será la que marque si se salva o no la campaña”.
Fuente: diariodealmeria.es