El pasado fin de semana, en el Langkloof, a caballo entre el Cabo Oriental y el Cabo Occidental, recibió granizo por tercera vez este verano en un área que abarca prácticamente todo el valle, desde Avontuur y Uniondale en el oeste hasta Joubertina y Krakeel, y quizás donde más daños se hayan producido sea alrededor de Misgund.
La cosecha de fruta de pepita se encuentra en cerca de un tercio de su recorrido en el Langkloof.
"Se suponía que íbamos a empezar a cosechar las Forelle hoy, pero el cultivo ha quedado arrasado", lamenta Marius van der Westhuizen, agricultor del Langkloof y representante de Hortgro en la zona.
El lunes todavía llovía con fuerza y los agricultores no pudieron acceder a los huertos para determinar el alcance de los daños. El consejo de Hortgro se reunirá la próxima semana para discutir el impacto del granizo, pero será significativo, afirma Marius, y agravado por el hecho de que las fábricas de zumo ya tienen exceso de fruta.
En el Cabo Oriental y Occidental, las fábricas de zumo han introducido cuotas que limitan la aceptación o solo volverán a aceptar volúmenes dentro de unas semanas.
Las fábricas de zumo ya están inundadas de manzanas y peras
"Hay un cuello de botella enorme en las fábricas de zumo, donde existe una tremenda sobreacumulación de fruta en este momento. Antes, simplemente dejabas la fruta dañada por el granizo en una fábrica de zumo para no incurrir en una pérdida total, pero ahora mismo las fábricas de zumo están inundadas de producto".
Marius continúa: "Durante varias semanas, las fábricas de zumo han recibido ya un 200% más de fruta que nunca, y hay colas kilométricas de camiones a la espera de descargar más fruta en las fábricas de zumo".
Estas fábricas son una salida para los productos que han pasado a tener unos precios marginales. Marius señala que en la fábrica de zumo del Langkloof la oferta ha superado las 3.000 cajas diarias, cifra que se elevará después del granizo.
Aparte de la inflación en otros aspectos como el embalaje y la electricidad (que, irónicamente, se ha elevado un 19% este año), además del incremento anual del salario mínimo, el inmenso desembolso en diésel se ha convertido en una nueva partida de gastos para los almacenes de envasado y los almacenes frigoríficos.
Ahora, los agricultores se enfrentan a una difícil decisión: si la fruta que no ha quedado irrevocablemente dañada por el granizo no se puede llevar a la fábrica de zumo como antes, ¿vale la pena almacenarla junto con la fruta de primera categoría en una cámara de atmósfera controlada hasta más adelante, cuando quizás la fábrica de zumo la acepte? Los costes de almacenamiento son cada vez más caros debido a que, durante muchas horas al día, se necesitan generadores diésel para mantener la cadena de frío.
"Y, además, en realidad estás 'robándole' al producto de exportación el sitio en la cámara de atmósfera controlada, solo para intentar evitar una pérdida total, pero sin garantía de éxito".
Marius subraya que es imposible que la situación en las fábricas de zumo se normalice en los dos o tres próximos meses.
"Por eso digo que el sector frutícola del Cabo Oriental está experimentando una tormenta perfecta. Todos estos factores van en contra de los productores y hace plantearse un gran interrogante sobre la rentabilidad de los productores de manzanas y peras esta campaña".
Enviar la fruta a los mercados municipales introduce otro elemento de riesgo, pues algunos mercados tienen dificultades para refrigerar debido a los incesantes cortes del suministro eléctrico y a la incapacidad de los municipios, faltos de liquidez, para suministrar diésel a los mercados, en el contexto de las muchas necesidades sociales de Sudáfrica.
"Nos asaltan desafíos desde absolutamente todos los frentes, y los productores se enfrentan a decisiones casi imposibles. No podemos edulcorar la realidad".
Observa que los productores aprenden a recomponerse tan rápido como pueden.
"En eso están trabajando ahora los productores, en ajustar su refrigeración y sus planes comerciales, porque esto tiene unas repercusiones que afectan a toda la cadena de valor. Ahí es donde organizaciones como Hortgro y el resto de la agricultura organizada desempeñan una función tan valiosa, en ayudar a los agricultores a superar juntos estos tropiezos".