Actualmente, la gama entera de hortalizas alcanza precios muy elevados en Bélgica, como en todos los países europeos. Y es que en España, las temperaturas volvieron a caer después de un repunte, mientras que los volúmenes de suministro belga siguen siendo muy limitados en estas fechas. "No es que haya escasez de productos, pero la oferta ciertamente es limitada. Los precios han sido muy altos durante algún tiempo y creo que puede haber problemas de suministro hasta abril/mayo. Sin embargo, nunca se sabe lo que puede pasar en este sector", dice Christoph Bouvry, del mayorista homónimo de la preciosa ciudad belga de Brujas.
Sin embargo, el comerciante indica que el período más problemático parece haber quedado atrás. "La verdad es que es difícil conseguir casi todo tipo de hortalizas. Coliflores, pimientos, calabacines: todo es caro, pero siempre llega el punto de inflexión. Y es que empiezan a llegar de nuevo algunos volúmenes de producto belga, como por ejemplo pimientos verdes y berenjenas. El suministro belga puede darle la vuelta a la situación del mercado y, además, el tiempo en España mejorará de nuevo en las próximas semanas. El mercado sin duda se recuperará, pero la pregunta es cuándo exactamente. Lo que es cierto es que ya no puede ir a peor".
Como prueba de que las cosas pueden ir cambiando muy rápido, Christoph da el ejemplo de los tomates belgas de esta semana. "Anteayer se cuadruplicó la cantidad de tomates belgas en la subasta. Los precios bajaron de inmediato a un nivel aceptable. Como digo, las cosas cambian de un día para otro en este sector. Tan pronto como haya suficiente suministro, los precios caen. Y si la oferta local no empieza a despegar antes de finales de abril, confío en que España pueda llenar la brecha".
Por otro lado, seguramente seguirá habiendo problemas en el segmento de la coliflor. "El suministro de coliflores queda muy rezagado. La semana pasada hubo un breve repunte de entregas, lo cual hizo que los precios bajaran de manera significativa, pero esta semana han vuelto a subir con fuerza debido a esta última ola de frío en España".
No obstante, Groothandel Bouvry sigue moviendo bastantes volúmenes de frutas y hortalizas en estos momentos. "Las ventas de clementinas son muy fluidas y los kiwis también son populares entre nuestros clientes en este momento. Ya hemos ofrecido los primeros espárragos de cultivo local, aunque las cantidades son muy limitadas. Las ventas, sin embargo, no alcanzan el nivel habitual en términos de volúmenes, lo cual es lógico, teniendo en cuenta los precios elevados. La facturación, por otro lado, se mantiene estable. Y es que los altos precios compensan la reducción de los volúmenes suministrados. Ahora estamos esperando con ansias la subida de las temperaturas, ya que esto siempre anima a la gente a comprar más frutas frescas", concluye Christoph.
Para más información:Christoph Bouvry
Bouvry
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