La rotura de un dique está teniendo consecuencias enormes para las comunidades agrícolas de California en las zonas de Watsonville y Salinas. Se estima que esta región cultiva cerca de un tercio de las fresas del estado. La rotura de un dique en el cercano río Pájaro el pasado viernes día 10 de marzo provocó la evacuación de más de 8.000 personas e inundó cientos de hectáreas de fresas. Se estima que en torno a una quinta parte de los campos de fresas de las zonas de Watsonville y Salinas están bajo el agua. En estos momentos, se desconoce si las plantas podrán recuperarse. En el valle del Pájaro, las fresas se plantaron el pasado otoño, lo que significa que la fruta podría haber llegado a las tiendas este verano.
Es difícil imaginar los campos mojados, pues los agricultores de California llevan muchos años afectados por la sequía. Sin embargo, este invierno el estado ha sido testigo de todo tipo de fenómenos, desde lluvias intensas hasta tormentas de nieve e inundaciones.
Aunque las fresas son un cultivo clave en esta región, también se han visto afectados otros cultivos como lechugas y otras verduras.
Foto: Driscoll's.
Muchos trabajadores agrícolas han tenido que ser evacuados de sus hogares y ahora no tienen trabajo, ya que no se puede acceder a los campos. Driscoll's, empresa familiar con profundas raíces en el valle del Pájaro, ha publicado en LinkedIn cómo se han visto afectados sus empleados, productores independientes, trabajadores agrícolas y residentes de la comunidad. Los empleados de la empresa han ayudado a recaudar miles de dólares para que los habitantes de las comunidades afectadas puedan comprar agua y productos de higiene personal. Driscoll's ha donado 340.000 $ a organizaciones locales para alimentos, refugio y otras necesidades.
Sur de California
Oxnard, también una región clave para el cultivo de fresas, pero más al sur, recibió una cantidad de lluvia histórica la semana pasada. La fruta de esta zona se encuentra en producción ahora mismo y ha sufrido daños a causa de las lluvias. Además, las lluvias históricas podrían provocar el desarrollo de problemas de deterioro.