Ahora mismo, hay muchas uvas en el mercado estadounidense. "Estados Unidos está inundado de uvas. En Chile la cosecha está en torno al 80 por ciento y la mayoría de la fruta para nosotros se ha cargado. Hay mucha fruta en camino y mucha fruta llegando a los Estados Unidos, principalmente", dice Nicolas Damm, de Rio Blanco.
Los motivos de que haya tantas uvas son varios, empezando por Perú. Esta temporada, el país comenzó más tarde de lo previsto inicialmente, sobre todo por las huelgas que sufrió en enero y que provocaron retrasos en la cosecha y en la carga. En cuanto a Chile, una ola de calor afectó al cultivo. "La temporada empezó despacio por el norte, pero después las cosechas se concentraron mucho. La fruta se presentó en racimos más ligeros a causa del calor, y la cosecha de todas las variedades finalizó antes y con menores volúmenes. También se concentró, seguramente debido al cambio de variedades", explica. "Tendremos una cosecha históricamente reducida".
Damm señala que en Chile se están almacenando algunas frutas para enviarlas más adelante, incluso en la semana 15, con la esperanza de que el mercado estadounidense se despeje un poco. No obstante, la mayoría de los productores casi han acabado o han acabado ya la temporada.
El estado de las cámaras frigoríficas
En términos de demanda, Damm opina que en los Estados Unidos hay nerviosismo por las cuantiosas llegadas. "Las cámaras frigoríficas están bastante llenas en la costa este, cerca de Filadelfia sobre todo. Al parecer, hay bastante volumen de fruta débil. El calor también ha perjudicado a los calibres", comenta, y subraya que, históricamente, es pronto para la cantidad de volumen que están absorbiendo los Estados Unidos. "Normalmente, es un poco más tarde, así que es probable que algunas promociones no estuvieran adaptadas a los supermercados. En las últimas semanas ha habido menos volumen, así que hay luz al final del túnel. Estas inmensas llegadas semanales no durarán mucho. Seguramente, a partir de ahora, pasadas las semanas de pico de llegadas, habrá menos volúmenes de Chile y Perú".
En cuanto a precios, aunque en enero hubo menos fruta a precios más altos, cuando aumentó el volumen los precios no tardaron en bajar. Aunque Rio Blanco no trabaja mucho con precios al contado, Damm dice que ahora la buena fruta está entre 12 y 18 $.
Pese a las dificultades que ha experimentado la temporada chilena de uva este año, ha mejorado con respecto al año pasado, en particular en términos de mercado y logística. "La fruta se ha cargado a tiempo, los puertos han funcionado bien, los buques han cumplido el calendario y se han cargado a tiempo. Los tránsitos se han aproximado a lo normal y la situación portuaria en los Estados Unidos prácticamente ha regresado a la normalidad", explica. "El volumen ha provocado que haya que reforzar la cámara frigorífica. No obstante, la fruta está llegando al mercado como producto fresco, lo cual está bien, aunque no tiene tanta vida útil por la ola de calor".
Esos menores rendimientos preocupan en cuanto a la rentabilidad para los productores. "Con suerte, los precios tenderán más al alza que la temporada pasada, pero los resultados finales para el productor se verán afectados de todos modos por la pérdida de volúmenes", apunta Damm.
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