En el mercado belga, la oferta local de cebollas es actualmente muy cara. Debido a ello, la empresa de pelado de cebollas Ongena está buscando cebollas de importación. "El suministro de cebollas holandesas y belgas es muy limitado y, por tanto, estas resultan demasiado caras para nosotros, así que buscamos alternativas. También tenemos que mirar por el bolsillo de nuestros clientes, así que es nuestro deber buscar buenas soluciones", afirma Joeri Ongena, de la empresa homónima de Moerbeke-Waas (Bélgica).
De ahí que la atención se centre en las cebollas de importación. "De momento, las estamos importando de muchas partes. Todo depende de dónde podamos encontrarlas a buen precio. Al fin y al cabo, no podemos decir 'vamos a parar unos meses'. Incluso con precios tan altos, hay que seguir abasteciendo a los clientes. Esa es también la razón de nuestro nuevo eslogan: 'Uien tot het Uiterste' ('Cebollas hasta el final')".
Cebollas hasta el final
De hecho, este impulso ha llevado a la empresa a presentar una nueva identidad. "Tras 10 años, era ya hora de renovarse. Son tiempos difíciles para los empresarios y siempre hay que atreverse a innovar", explica Joeri. "Por tanto, hemos lanzado un nuevo logotipo, un nuevo sitio web, un nuevo eslogan y una nueva imagen que transmita que nunca abandonamos, ni nuestro propio cultivo ni el servicio a los clientes. Nunca decimos que no y el cliente sabe que hacemos todo lo posible por ellos en todos los ámbitos. Nos mantenemos en contacto con el cliente y le comentamos abiertamente cualquier problema o preocupación, así como decisiones, como la actual de trabajar con cebollas importadas más baratas para que nadie tenga que asumir unos precios innecesariamente altos".
En cuanto a la demanda, Ongena sigue esperando el buen tiempo del verano. "Siempre va a haber consumo de cebollas, así que seguirán funcionando bien durante todo el año. Por otro lado, en el siempre popular segmento de las cebollas peladas, la situación está un poco más tranquila por ahora. Normalmente, si el tiempo es favorable, la temporada de barbacoas arranca hacia mediados de marzo. Esta vez, sin embargo, se ha retrasado debido al mal tiempo. En consecuencia, la situación ha estado un poco más tranquila. Aún habrá que esperar, pero las temperaturas ya se están suavizando. Cuanto más suban en las próximas semanas, más ajetreados estaremos nosotros".
Nueva cosecha
En vísperas de la nueva cosecha de cebollas holandesas y belgas, la empresa también ha empezado a construir una nueva nave para almacenamiento. "A partir del verano, empezaremos a almacenar más cebollas y patatas de nuestra propia explotación agrícola. El objetivo es que las nuevas instalaciones estén operativas en septiembre, cuando lleguen las cebollas de almacén. Puede que nos lleve aún algo de trabajo, pero lo vemos factible. Lo habíamos estado aplazando una y otra vez, esperando a que se normalizaran los precios en el sector de la construcción. Ahora parece que tenemos que aceptar que seguirán altos. No van a bajar, así que no tiene sentido esperar".
"En mi opinión, el precio de mercado de la cebolla para el productor también podría mantenerse un poco más alto", concluye Joeri. "Tampoco hacen falta precios tan extremos como los de la temporada pasada, ya que a nosotros, como procesadores, eso nos dificulta las cosas, pero unos precios extremadamente bajos, o incluso de dumping, por debajo del precio de coste del cultivo, son una falta de respeto por el trabajo del agricultor. En el fondo, sigo sintiéndome como un hijo de agricultor, y estoy orgulloso de ello".
Para más información:
Joeri Ongena
Uienschilbedrijf Ongena
Ledestraat 22
9180 Moerbeke-Waas, Bélgica
info@ongena-uien.be
www.ongena-uien.be