Caléndulas, fucsias, bocas de dragón o pétalos de rosa; estas son solo algunas de las flores comestibles de Van Vugt Kruiden, que ahora cuenta con más de 20 productos. "Pero los favoritos siguen siendo los pensamientos", explica Piet van Vugt. En sus invernaderos de Ridderkerk, el cultivador de hierbas reservó una hectárea para el cultivo de flores comestibles cuando se trasladó a las nuevas instalaciones hace cuatro años. Desde 2020 se utilizan lámparas de cultivo, y Piet ha dado con la receta lumínica óptima tras años de pruebas, lo que le permite ofrecer durante todo el año flores comestibles de producción holandesa.
"El éxito de las flores comestibles depende de la disponibilidad. Si los clientes se entusiasman con un producto, pero no pueden pedirlo, el interés se diluye pronto. Ahora que podemos usar luz artificial en invierno tenemos siempre capacidad para servir a nuestros clientes y vemos que, gracias a ello, los clientes usan cada vez más flores comestibles", dice Pete. "Seguimos ampliando nuestra gama. Un dato curioso es que se piden flores comestibles de colores específicos. Las mezclas también son muy populares".
Esto tampoco significa que las ventas de flores comestibles no hayan hecho más que crecer. Cuando el sector de la restauración cerró sus puertas debido a la pandemia del coronavirus, Van Vugt se quedó sin salidas para las flores comestibles. "Eso sí, desde que todo volvió a abrir el verano pasado, las ventas no han dejado de aumentar y eso nos alegra mucho. Para nosotros se trata de un complemento perfecto para las hierbas frescas que comerciamos desde hace años. Envasamos las flores comestibles en bandejas con perforaciones para garantizar su frescura, porque si no las envasamos, las flores se marchitan a la media hora. Con esto damos a las flores una vida útil de 10 días".
"El sector de la restauración sigue siendo el mayor comprador de flores comestibles, pero en Semana Santa y Navidad también hacemos cada vez más promociones en supermercados. Esto ayuda muchísimo, ya que hace llegar las flores comestibles a más gente", afirma Pete. El pico de ventas de flores comestibles sigue estando en Navidad. "Es entonces cuando la gente busca algo especial para sus platos, aunque las ventas de Semana Santa también son buenas, y en verano las flores comestibles vuelven a utilizarse mucho en ensaladas, así que las ventas no dejan de aumentar".
El productor cree que el mercado seguirá creciendo en los próximos años. "El mercado demanda regularmente flores comestibles de las que aún no disponemos, y entonces estudiamos las posibilidades. Sembramos todo nosotros mismos y obtenemos las semillas de algunas flores. Hablamos de un proceso realmente pionero y muy intensivo, pero muy divertido de hacer, con unos cultivos que cambian muy rápidamente para evitar la propagación de enfermedades".
"Crecemos con el mercado. Logramos la mayor parte de nuestro crecimiento con nuestros clientes actuales, lo cual es bonito. Trabajamos con precios fijos y no dependemos de lo que ocurra en el mercado diario. Esto nos permite ofrecer a los clientes la estabilidad que necesitan, evitándose las fluctuaciones de precios. Sin duda apostamos por las relaciones a largo plazo. Juntos podemos construir algo valioso en el mercado".
Para más información:
Piet van Vugt
Van Vugt Kruiden
Hoogzandweg 16
2988 DA Ridderkerk
+31 (0)180-625660
info@vanvugtkruiden.nl
www.vanvugtkruiden.nl