"El mercado danés de la vainilla es bastante grande: casi todos los supermercados venden vainas. El precio normal de una vaina grande es de 120-150 coronas, y algunas personas raspan el interior del producto para obtener el dulce contenido", dice Ann Sofie Forssling, fundadora de Dansk Vanilje.
Ann Sofie Forssling.
Dansk Vanilje es una plantación de interior en Dinamarca que pretende cultivar vainilla en entornos cerrados. Como explica Ann, el contenedor se ha equipado con iluminación led y sistemas de ventilación, calefacción y deshumidificación para crear el entorno perfecto para las orquídeas de vainilla.
Mientras que las hortalizas de hoja verde y otros cultivos típicos de la agricultura vertical suelen tardar menos de un mes en crecer, las orquídeas de vainilla pueden tardar hasta tres años en producir flores si se empieza con una enredadera de un metro de largo. Esto convierte a la vainilla en un cultivo de alto riesgo para el sector de la agricultura vertical, que ya de por sí tiene que hacer frente a elevados costes de explotación y, a menudo, escasos beneficios.
"Empezamos con un centro de producción muy pequeño para aprender a cultivar el producto sin que nos cueste una fortuna. Hay mucho que aprender sobre el clima, la inducción de la floración, el suelo y la humedad, etc.", según Ann.
En cuanto a la floración, la cuestión es si basta con esperar tres años o si se puede acelerar proporcionando un periodo frío o seco. En un entorno cerrado, el clima puede modificarse fácilmente para crear condiciones frías y secas que estimulen la floración. Ann explica que necesitan mantener la humedad relativa lo suficientemente alta para evitar que las raíces se sequen.
Actualmente, Ann Sofie está realizando un ensayo de iluminación con luz azul en un lado y luz roja en el otro lado del contenedor.
¿Cómo se cultiva la vainilla en interior?
Las orquídeas de vainilla son altas lianas que pueden alcanzar los 30 metros de longitud, con enredaderas alrededor de árboles u otros soportes. En Dansk Vanilje, el uso de árboles artificiales permite a la liana trepar como lo haría normalmente y extraer la humedad que se ha condensado en el árbol. Dansk Vanilje también ha instalado iluminación superior led y soluciones de interiluminación para garantizar niveles de luz uniformes en toda la copa, aunque las orquídeas no requieren un nivel de luz tan alto como otros cultivos hortícolas. La empresa está experimentando con iluminación roja y azul y de amplio espectro.
En unas instalaciones de cultivo de 200 m² construidas recientemente, Ann Sofie alberga varios plantones y plantas jóvenes.
Como las orquídeas son plantas CAM, absorben dióxido de carbono durante la noche para hacer la fotosíntesis durante el día. Aunque Dansk Vanilje controla los niveles de dióxido de carbono y dispone de un sistema de enriquecimiento, lo utiliza muy poco, ya que las necesidades de dióxido de carbono de las plantas son bajas. Dansk Vanilje también ha equipado los contenedores con varios sensores ambientales para controlar la temperatura, la humedad, el dióxido de carbono y los niveles de luz en el espacio.
Aunque a Dansk Vanilje le gustaría obtener la certificación ecológica, por el momento no es posible, ya que las plantas se cultivan en una mezcla de turba, coco y corteza, en lugar de en el suelo superficial.
Un plantón de vainilla.
La cosecha no es el último paso en la producción de vainilla
Pero avancemos tres años en el ciclo de producción, cuando Dansk Vanilje tendrá sus primeras vainas de vainilla cultivadas en casa. Incluso entonces, el reto no ha hecho más que empezar. Una vez polinizadas las flores de vainilla, la vaina tarda entre 8 y 10 meses en alcanzar la plena madurez, momento en el que la vaina aún está verde. Las vainas de vainilla se cosechan verdes y después pasan por un periodo de maduración de 2 a 3 meses durante el cual se les da vueltas continuamente para que adquieran el color y el sabor adecuados. Después, las vainas tienen que secarse durante otros 3-4 meses.
Lo ideal es que este periodo de maduración se produzca al aire libre, a pleno sol. Sin embargo, Ann señala que las autoridades danesas no permiten secar las vainas de vainilla al aire libre por cuestiones de seguridad, lo que obliga a Dansk Vanilje a "secar" las vainas en el interior. Esto puede tener un efecto negativo en el desarrollo del sabor, la conservación y la proliferación de patógenos. Por ello, la empresa está buscando mejores formas de secar sus vainas de vainilla cumpliendo la normativa local sin perjudicar la calidad del producto.
La importación de material vegetal sigue siendo un reto
Otro obstáculo reglamentario al que se enfrenta Dansk Vanilje es la importación de material vegetal en la Unión Europea. Dansk Vanilje tiene veinte plantas sanas que se obtuvieron de la Universidad de Wageningen, pero en 2021, la empresa compró 200 esquejes de orquídeas de vainilla de Tanzania y tenía el espacio listo para plantar antes de recibir la noticia: los 200 esquejes no se permitirían en la UE. Como consecuencia, la planta de producción de 200 metros cuadrados estuvo vacía durante cuatro meses, a la espera de unas plantas que nunca llegarían.
Mucho margen de expansión.
Hace tres semanas, Ann consiguió recoger 50 plantas de Eslovenia, que no eran las más sanas, pero que son mejor que nada. La experta también ha encargado 200 pequeñas plantas procedentes del cultivo de tejidos y está trabajando en el papeleo para garantizar su entrada en los próximos tres meses.
Para más información:
Ann Sofie Forssling, fundadora
Dansk Vanilje
+45 9383 5156
asf@danskvanilje.dk