Ante la reducción de hasta el 88% del agua disponible para riegos, como recuerda Alejandro Rodríguez, comisario de aguas de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, se ha observado una activación en la compraventa de derechos de riego entre los agricultores afectados por la sequía en la cuenca.
Así, muchos agricultores intentan comprar para sus producciones la poca agua que otros venden porque no han podido sembrar este año, como los productores de arroz del Guadalquivir, que tienen 35.000 hectáreas en barbecho y unos derechos de riego de 45 hectómetros cúbicos. Sin embargo, la Mesa Social del Agua teme que eso dé lugar a la especulación.
"Hemos denunciado que no hay transparencia en esa cesión de derechos, y que la situación de la cuenca es crítica. Este mercadeo está creando agravios comparativos entre los regantes de la cuenca", remarcó Noelia Márquez, de la Mesa Social del Agua de Andalucía de COAG.
No obstante, los regantes niegan que sea un negocio. Según cuenta Álvaro Pallarés, de los Regantes de la Margen Derecha del Guadalquivir, el objetivo es "intentar compensar los gastos" de infraestructura de riego o las cuotas de potencia contratada. De paso, al cedérsela a sus compañeros de cuenca, ya que al menos ellos podrán salvar su arboleda y sus cultivos.
Los regantes andaluces han establecido un precio de 24 céntimos por metro cúbico y piden celeridad a la Confederación Hidrográfica para aprobar las cesiones. "Porque el agua tenemos que disponer de ella ya; no podemos esperar a disponer en septiembre, porque en septiembre los árboles se han secado", afirma José Manuel Cepeda, de la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (FERAGUA).
Fuentes: rtve.es