Hasta el 23 de mayo, solo se habían cosechado 728.000 cajas de uva mexicana, frente a las 2.957.000 cajas cosechadas hasta el 23 de mayo del año pasado, una diferencia de más de dos millones de cajas. Aunque la cosecha comenzó hace unos diez días, por el momento hay muy poco volumen disponible. "El inicio de la temporada de uva mexicana nunca había sido tan tarde", dice Miky Suárez, de MAS Melons & Grapes. "Nuestros productores no empezarán a cosechar hasta el lunes o martes de la semana que viene", comentaba la pasada semana.
Las condiciones meteorológicas desempeñan un papel importante en el retraso del inicio de la temporada. "En febrero, el tiempo no fue el mejor". Hizo más frío y viento de lo normal y se registraron algunas precipitaciones, algo poco habitual en febrero. Sin embargo, las nuevas variedades también están provocando un cambio en el inicio de la cosecha. "Las nuevas variedades tienen un comienzo más tardío por naturaleza", afirma Suárez. "Llegan al menos dos semanas más tarde en comparación con variedades tradicionales como Perlette y Flame, que están desapareciendo poco a poco y siendo sustituidas por las nuevas".
Escasez en el Día de los Caídos
"Ahora mismo, todo el mundo está desesperado por conseguir uvas". Chile terminó antes y México empezó tarde. "Como resultado, apenas hay uvas disponibles y hay una gran, gran escasez para el Día de los Caídos. Las uvas para el festivo deberían estar ya de camino a la costa este para estar en las tiendas a tiempo, pero este año no está siendo así", afirma Suárez. El volumen disponible es mínimo.
El retraso podría plantear problemas al final de la temporada. En una temporada media, la cosecha termina la primera o segunda semana de julio, con muy poca fruta en movimiento en julio. Este año, sin embargo, se espera que la cosecha continúe hasta mediados de julio, lo que aumenta las posibilidades de estar expuestos a las lluvias. "Las lluvias suelen empezar a finales de junio, pero esperemos que este año se retrasen".
Por ahora, toca esperar, pero junio será un gran mes para la uva mexicana. La previsión inicial del sector era un volumen de producción total de 21,7 millones de cajas. "Aunque esta cifra puede resultar un poco corta, habrá mucha fruta disponible hasta la segunda semana de julio". En un año normal, el final tardío de México daría lugar a un solapamiento con la producción de California. "Sin embargo, California también empezará tarde este año, lo cual es bueno. Nos dará tiempo a mover el volumen mexicano antes de que empiece California".
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Miky Suarez
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