Las constantes lluvias de mayo han arruinado la cosecha en buena parte de las zonas productoras de cereza de la Comunitat Valenciana, con especial incidencia en la zona de la IGP Cerezas de la Montaña de Alicante, donde existen muchas explotaciones con pérdidas totales ya que a las precipitaciones hay que sumar la sequía anterior y las elevadas temperaturas en la floración.
Productores, cooperativas y empresas están atravesando así una grave crisis que provoca una desaparición importante de zona cultivada. En la Comunitat Valenciana, según los últimos datos publicados de 2021, hay 2.522 hectáreas de cerezos, de las que el 74% se sitúan en la provincia de Alicante (el 96% de la cosecha alicantina se ubica en la zona amparada por la IGP), el 23% en la de Castellón y solo el 3% en la de Valencia. Las principales zonas de cultivo se sitúan en las comarcas alicantinas del Comtat, Marina Alta y Vinalopó, la Serra de l’Espadà, Alto Mijares, Alto Palancia y Maestrat en la de Castellón y la Serra Calderona en Valencia.
En los últimos seis años se han abandonado casi 400 hectáreas cultivadas de cerezos, el 13% de la superficie. De esta cantidad, 292 hectáreas corresponden a la provincia de Alicante, lo que significa que el 74% de las tierras perdidas en la Comunitat Valenciana se sitúa allí, la mayor parte en la zona amparada por la IGP Cerezas de la Montaña de Alicante. En la de Castellón se han abandonado 130 hectáreas, el 19% de su superficie.
En relación con la producción hay que destacar que el parámetro que ha marcado la misma hasta provocar cosechas mínimas es la concatenación de diversos factores climatológicos. “Se trata sin duda de uno de los cultivos a los que más está afectando el cambio climático”, asegura LA UNIÓ, quien incide en que por ejemplo en la IGP Cerezas de la Montaña de Alicante se esperaban unos 4 millones de kilos esta campaña que se habrán quedado en apenas 500.000 kg.
La Unió Llauradora solicita ayudas directas para los productores que llevan ya cinco campañas seguidas con una baja producción como consecuencia de las inclemencias climáticas y que sufren la falta de un seguro útil que se ajuste a la realidad productiva del sector.
Para más información:
La Unió Llauradora
https://launio.org