El presidente del comité de productores de limón Sagrado Corazón en Tumbes, Juan Arica Lavalle, detalló a Exitosa que la situación de este producto, ingrediente básico en la gastronomía, es preocupante porque hay una bajísima producción en el norte. “El limón no ha floreado como debería. Se está sacando lo mínimo”; de hecho, según Arica, en Tumbes se ha pasado de una productividad de hasta 20 mallas de limón de una hectárea de cultivo a la media malla que se está extrayendo ahora.
No obstante, se prevé que esta situación mejorará un poco a fines de este 2023. “A partir del mes de noviembre o diciembre (...) ya podremos tener limón”, cuando los precios ahora elevados se irán regularizando.
No solo es El Niño Costero el que está impactando en una menor producción de limón, “le está afectando el cambio climático, el abonamiento y las inundaciones. Las parcelas se llenan de agua, esa agua se calienta y afecta y la planta ya no produce. Estoy sumamente preocupado. Piura y Tumbes están en el mismo problema del limón. No tenemos un plan de contingencia”, refirió a Exitosa.
Debido a este contexto, Arica Lavalle solicitó que el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego adopte medidas ante la falta de proyectos efectivos para la entrega de abonos a los agricultores.
Fuente: larepublica.pe