La campaña de limón de España acusa una falta de demanda por parte de los mercados europeos que está influyendo en una bajada continua de las cotizaciones, que en la semana 45 se ubican en una media entre los 0,32 y 0,37 euros el kilo, en origen.
"Se observan notas de nerviosismo justificado en el campo a medida que avanza el mes de noviembre", señalan desde la Asociación Interprofesional del Limón y el Pomelo, Ailimpo. "Hay pocas operaciones y ninguna alegría desde la parte compradora debido a que los volúmenes exportados siguen siendo limitados, básicamente porque el mercado no está realmente activo".
De acuerdo con la asociación, la presencia de los limones de Turquía es irregular en los mercados europeos debido a la presencia de lotes con pesticidas, por lo que "automáticamente", afirman, "los expulsa de muchas cadenas de supermercados". Sin embargo, lamentan que "la presión de los compradores está haciendo que el precio del limón español se erosione semana tras semana".
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