Los orígenes de la que es la mayor cooperativa productora y comercializadora de tomate de Europa, CASI, se remontan a 1944, cuando un grupo de productores de la Vega de Almería se unieron para comercializar juntos su producción de patata. Aquella unión fue creciendo con nuevos productores de hortalizas que apostaron por el cultivo de tomate y a utilizar invernaderos a medida que, tanto la agricultura intensiva bajo plástico como el cultivo de la que es una de las hortalizas más consumidas en la actualidad, se extendía en la provincia, hasta convertirse hoy en día en la cooperativa líder de su segmento.
“Hoy en día CASI está formada por casi 1.400 socios; pequeños agricultores con una superficie media de 1,5 hectáreas”, señala Antonio Bretones, presidente de CASI, mientras recorremos las instalaciones de CASI Aeropuerto, un centro que se puso en funcionamiento en 2014 dedicado al producto para exportación, en el que cuentan con la última tecnología y automatización para la confección de los 240 millones de kilos de tomates que comercializan anualmente.
“La subasta ha sido nuestro corazón desde nuestros inicios y, de hecho, representa el 50% de nuestra actividad, mientras el otro 50% es la comercialización directa”, prosigue Antonio, “aunque también tenemos un servicio de venta directa online al cliente final que cada vez recibe más pedidos”.
“También tenemos La Plaza, que es un punto de venta para los vendedores y las tiendas de la comarca, y que queremos ampliarlo en nuestro centro de Partidores como una tienda abierta al público general y a nuestros trabajadores y socios, que también tienen a su disposición nuestra sección de suministro y nuestro equipo de técnicos. CASI es más que una cooperativa, es una gran familia”, destaca.
Gonçalo Andrade, de Portugal Fresh, y Wolfgang Braunstein, de gfa-consulting, junto a los miembros de CASI Julián Rodríguez, Esther Oliva, Antonio Bretones y Celedonio Pleguezuelos, en el reciente ICOP 2023.
“La campaña va unos 15-20 días retrasada respecto al año pasado”
“Esta campaña 2023/24 ha empezado con cierto retraso respecto a otros años”, continúa Antonio. “Ya sea porque la plantación se ha puesto más tarde por el tema de los calores, para no sufrir los problemas que hubo el año pasado, o porque los semilleros parece que se han retrasado unos días, la campaña va unos 15-20 días retrasada respecto al año pasado. Hasta ahora, al haber menos producción, ha habido en general un buen precio. Pero a medida que aumentan los kilos, los precios están bajando; para el pepino ha sido una caída libre con hasta un euro menos por kilo. No obstante, esperamos que el año no sea demasiado malo en precios porque los costes no bajan”.
CASI, especialista en tomates, trabaja varias decenas de variedades, muchas de ellas propias, que además han sido galardonadas por su sabor por el prestigioso concurso Sabor del Año, como Adora o Rebel. “Nuestro objetivo es producir tomates que tengan sabor, que es como queremos diferenciarnos de los demás productores de tomates commodity. Entre todas nuestras variedades destaca el tomate Corazón Invertido, un tomate de gran sabor que además tiene una gran consistencia y viaja muy bien, el Adora o el Rebel, que el año pasado ganó el premio Sabor del Año. Este año lo hemos vuelto a presentar, junto con nuestra nueva variedad de tomate negro Bárbaro”.
“De hecho, en estos momentos tenemos una finca de experimentación en la que estamos probando unas 60 variedades para producir y comercializar siempre los mejores tomates”.
La sostenibilidad es, asimismo, al igual que la calidad y el sabor, uno de los pilares en la producción de tomates de CASI. “Trabajamos en la implementación de la digitalización en las fincas de nuestros socios para aprovechar aún más el tema del agua. Hay que recordar que en Almería llevamos 60 años sin tener agua; para nosotros no es un tema nuevo. Toda la agricultura de Almería se inició con la misma carencia de agua que hay en la actualidad, y es un tema del que sabemos defendernos muy bien”.
“Siempre hablamos de un mar de plástico, pero si levantáramos las cubiertas de plástico de los invernaderos, tendríamos un vergel de 33.000 hectáreas en mitad del desierto”, comenta Antonio.
“Por último, además de nuestros centros de Partidores y Aeropuerto, tenemos un centro en San Isidro dedicado en exclusiva al producto ecológico, que está aumentando cada año”, indica Antonio Bretones. “El consumo, en cambio, está un
poco estancado desde hace dos años por la inflación y el diferencial de precio que tiene el producto ecológico frente al convencional; sobre todo notamos que es más difícil despachar el tomate bío en los meses de noviembre y diciembre”.
“Es un nicho de mercado con un plus añadido, pero con una clara limitación en volumen. La Comisión Europea quiere que el 25% de las tierras agrícolas sean ecológicas para 2030; es un objetivo muy ambicioso pero el mercado tendrá que soportarlo, y viendo la tendencia actual, parece difícil que se pueda conseguir. Por eso, en mi opinión, el futuro apunta más a una producción con residuo cero, que en Almería, en general, ya la tenemos”, concluye Antonio.
Para más información:
CASI
Carretera Níjar, la Cañada, km 8
04130 El Alquián, Almería (España)
Tel.: +34 950 626 141
[email protected]
www.casi.es