El 5 de julio se inauguró oficialmente la nueva temporada de zanahorias en los campos de la empresa isi Ismaninger Feldgemüse, cerca de Múnich. A pesar de algunas lluvias superfluas, la cosecha y la comercialización de las hortalizas de campo abierto han tenido este año un comienzo especialmente bueno, informa Peter Soller en nombre de la empresa. A diferencia del año pasado, este año las hortalizas de la región se han producido en abundancia, por lo que prevé que habrá que comprar pocas materias primas.
Además de zanahorias, el producto más importante en volumen, la empresa también comercializa cebollas, repollo, col lombarda y apio procedentes de la agricultura regional por contrato. Los productos se procesan principalmente para mayoristas y hostelería, por ejemplo pelados. "Suministramos sobre todo a empresas de corte que se encargan de seguir procesando las verduras o a proveedores de catering que las distribuyen en la restauración regional y la hostelería", explica Soller, cuya zona de influencia abarca no solo Baviera y Baden-Württemberg, sino también Austria.
Peter Soller dirige isi Ismaninger Feldgemüse GmbH desde 2001.
Buen comienzo de la temporada de zanahorias
Las primeras zanahorias bávaras de la temporada se cosecharon el 3 de julio. "En la primera fase de la temporada tuvimos sobre todo zanahorias grandes, lo que ha venido especialmente bien porque las zanahorias pequeñas se piden sobre todo para sopas y estas tienen menos demanda en verano. Además, al principio de la campaña había pocas zanahorias grandes procedentes del Palatinado, así como de Italia, por lo que, si no hubiéramos tenido productos propios en julio, no habríamos podido satisfacer en absoluto la demanda", resume Soller.
Las lluvias afectaron negativamente a los rendimientos en muchas regiones productoras, no así en esta explotación bávara. "Solo se quedó un poco de agua en dos campos, pero desapareció relativamente rápido. A finales de mayo, el nivel de las aguas subterráneas estaba entre 70 y 80 cm por encima de la media, pero esto no provocó pérdidas significativas".
Este año, la empresa celebró la inauguración oficial de la temporada de zanahorias el 5 de julio.
Buena situación de la oferta y la comercialización
La comercialización también ha empezado con buen pie hasta ahora, prosigue Soller. "Empezamos en el mercado abierto con precios por kilo de unos 0,90 euros para las zanahorias gruesas en sacos. A partir de mediados de julio, el nivel de precios fue bajando gradualmente hasta situarse en torno a los 0,60 euros/kg", explica, refiriéndose a la favorable situación de la oferta de muchos productos. "Ahora hay pleno suministro de zanahorias. En el caso de los apionabos, la diferencia de suministro entre la cosecha pasada y la nueva es mínima, de dos semanas, y la cubrimos con mercancía comprada en Países Bajos. Lo mismo cabe decir del repollo y la lombarda, de los que nos hemos abastecido en Países Bajos y Dithmarschen. En cuanto a las cebollas, a partir de la semana 33/34 esperamos poder procesar nuestra propia producción recién cosechada de calibre 70+. En este sentido, probablemente no tendremos que comprar mucho este año".
La demanda de hortalizas transformadas ha sido satisfactoria hasta ahora. "Las ventas en julio fueron muy altas, similares a las del año pasado. Agosto es tradicionalmente un poco más tranquilo debido a las vacaciones, especialmente en el sector de los comedores y la restauración colectiva. También nos beneficiamos de los numerosos eventos estivales en la zona de Múnich. Ya se han celebrado varios conciertos de Adele y Coldplay, lo que a su vez repercute positivamente en la demanda del sector de la restauración y la hostelería. En este sentido, la caída del poder adquisitivo aún no ha tenido un gran impacto en nuestro sector", concluye Soller.
Imágenes: isi Ismaninger Feldgemüse GmbH
Para más información:
Peter Soller
isi Ismaninger Feldgemüse GmbH
Mayerbacherstr. 50 85737 Ismaning
Tel.: +49 (0) 89 1430431-0
[email protected]
www.isi-gemuese.de