La temporada de recolección de frutas de pepita ha arrancado en la comarca de Calatayud, con la expectativa del aumento del 20% en la producción de pera y manzana. Esta expectativa positiva se mantiene a pesar de los desafíos presentados por las heladas de primavera y la presencia del fuego bacteriano en algunas plantaciones.
En particular, se espera que los árboles de pera de agua alcancen producciones de hasta 200 kilos por árbol. En áreas como el Manubles, se proyecta incluso duplicar la producción en comparación con el año anterior. Antonio Durán, un productor de Paracuellos de Jiloca, ya ha comenzado la recolección de pera de agua, observando que las heladas no comprometieron la calidad del fruto, lo cual le permite esperar un aumento del 25% en la cosecha de variedades como la pera de agua y la Ercolini.
En la localidad de Villalengua, Óscar Joven, de UAGA, pronostica una excelente campaña para la pera blanquilla, con expectativas de recolectar 50.000 kilos por hectárea. Sin embargo, la campaña enfrenta el reto del fuego bacteriano, una enfermedad sin cura ni tratamientos fitosanitarios efectivos, que ha afectado a varios árboles. Este problema ha llevado a la necesidad de arrancar árboles en años anteriores, instando a los productores a solicitar apoyo de la Administración para compensar los años de espera hasta que las nuevas plantaciones comiencen a fructificar.
Fuente: cartv.es