La pitahaya, conocida por sus notables beneficios y su llamativo color, se está convirtiendo en un fruto protagonista en el Perú, abriendo un abanico de oportunidades comerciales tanto para grandes agroexportadoras como para cooperativas. Este creciente interés se ve reflejado en los emprendimientos que están emergiendo en torno a su cultivo y comercialización.
Juan Castillo Ocaña, jefe de la sede regional de Piura de Sierra y Selva Exportadora (Agromercado), ha destacado el impresionante crecimiento de las exportaciones peruanas de pitahaya. A julio de 2024, el país alcanzó un volumen de exportación de 406 toneladas, valoradas en US$ 1.3 millones FOB. Este desempeño representa un aumento del 340% en volumen y del 560% en valor, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Europa se perfila como el principal mercado receptor, con especial interés por parte de los Países Bajos, Francia y España.
Camposol, una de las empresas líderes en este sector, ha sido identificada como responsable del 60% de estas exportaciones, lo que demuestra la creciente importancia de la pitahaya en el ámbito agroexportador peruano. Este fruto no solo se consolida como un cultivo con enorme potencial exportador, sino que también se presenta como una alternativa prometedora para la agricultura familiar y las grandes empresas, marcando un hito en el desarrollo agrícola del país.
Fuente: agraria.pe