La Conselleria de Agricultura ha pronosticado un bajo aforo para la campaña de cítricos 2024-2025 en Castellón, al prever una disminución del 23% en la producción de Clemenules. Esta merma, sumada a los sobrecostes por la sequía y las plagas, hace que los productores teman por su rentabilidad.
"Tenemos menos producción, hay falta de relevo generacional y recibimos más plagas introducidas por terceros países. Estamos en una situación difícil y en 3 o 4 años puede que no haya retorno. Solo aguantarán las grandes fincas que interesen a los fondos de inversión", ha alertado Cristóbal Aguado, presidente de AVA-Asaja.
A pesar de que un menor volumen de cosecha podría incrementar los precios de compra en origen al inicio de la campaña, las organizaciones agrarias y cooperativas advierten de que la combinación de merma productiva y costes crecientes por el tratamiento de plagas y la sequía limitará los márgenes de beneficio. Carles Peris, secretario general de La Unió, estima el alza de costes en un 40%.
En este contexto, la campaña ha comenzado con precios estables en las ventas en origen para las primeras variedades tempranas, según la Lonja de València, que registra unos precios cercanos a 0,40 euros, "un valor normal". Sin embargo, el mercado sigue enfrentando el desafío de la entrada de fruta infectada de otros países, lo que complica aún más el panorama para los productores locales.
Fuente: castellonplaza.com