Hasta la fecha, Perú ha exportado 293,512 toneladas, registrando un crecimiento del 48% respecto a la campaña anterior. Sin embargo, el sector ha enfrentado obstáculos logísticos que han exigido mayor planificación y nuevas estrategias para garantizar el abastecimiento en los principales destinos.
Estados Unidos sigue siendo el mercado con mayor recepción de arándanos peruanos, con 157,000 toneladas, equivalente al 54% del total exportado. Europa ha recibido 73,000 toneladas (25%), mientras que China ha importado 37,000 toneladas (13%), el Reino Unido 14,000 toneladas (5%) y otros 20 países han sumado 12,000 toneladas (4%).
En cuanto a variedades, Ventura domina en los envíos a EE. UU. y Europa, mientras que en China, Sekoya Pop es la más demandada. La diversificación varietal responde a las preferencias de cada mercado y al enfoque estratégico del sector para fortalecer su competitividad.
La producción de arándanos en Perú se concentra principalmente en La Libertad, que representa el 51% del volumen exportado. Otras regiones con una participación significativa son Lambayeque (23%), Ica (11%), Lima (7%) y Áncash (5%), que en conjunto suman el 98% del total exportado. Mientras tanto, Piura, Moquegua y Arequipa contribuyen con el 2% restante, lo que indica una distribución aún limitada del cultivo en otras zonas del país.
A pesar del crecimiento en exportaciones, la campaña ha estado marcada por dificultades en la logística. Entre noviembre y diciembre, la coincidencia con la temporada de uva provocó una escasez de transporte refrigerado y espacios marítimos, lo que dificultó la fluidez en las entregas. Además, las huelgas en la costa este de EE. UU. y la congestión en Panamá afectaron los tiempos de tránsito hacia los principales destinos.
Otro factor crítico ha sido el incremento en las tarifas de flete, con sobrecostos de hasta un 40% en determinados periodos debido a la alta demanda y recargos extraordinarios. Ante esta situación, los exportadores evalúan nuevas alternativas, incluyendo la utilización de buques cámara, una modalidad ya empleada en el envío de uva y que podría aplicarse próximamente al arándano.
Para la temporada 2024-2025, se estima que los envíos de arándanos frescos peruanos alcancen 312,195 toneladas, un ajuste del -3.6% frente a la estimación inicial.
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