¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber

Los calibres pequeños de ajo de Mendoza tienen oportunidades en los mercados de ultramar

Fabián Fusari, presidente de la Asociación de Productores, Empacadores y Exportadores de Ajo, Cebollas y Afines de la Provincia de Mendoza (Asocamen) y agrónomo, ha señalado que la reciente temporada de ajo no cumplió con las expectativas en cuanto al tamaño de las cabezas debido a los intensos fríos que impactaron el desarrollo de los cultivos. Sin embargo, esta situación ha abierto algunas oportunidades en el mercado mundial, donde se ha observado un desabastecimiento de esta hortaliza, permitiendo la aceptación de ajos de menor calibre.

La industria del ajo pelado y la pasta de ajo, en crecimiento a nivel global, junto con un mercado significativo en Centroamérica y Taiwán para los calibres más pequeños, ofrecen alternativas para los productores de Mendoza. Estos mercados consumen ajos de tamaños menores, lo que ha facilitado la colocación del producto en dichas regiones.

Ante los bajos rendimientos por hectárea y los altos costos, los desafíos para la próxima temporada incluyen mejorar la calidad del suelo y los rendimientos para optimizar el período de precosecha. Fusari destaca la importancia de superar problemas visuales como las manchas por carbonillas, que, aunque no afectan la comestibilidad del ajo, sí reducen su valor en el mercado.

Reducir los costos y eficientizar los recursos son objetivos fundamentales, especialmente frente a la competencia de países como China, Turquía, México, Perú y Marruecos en el mercado europeo. A pesar de la alta calidad del ajo argentino, los menores precios de estos competidores representan un desafío constante. Los costos energéticos, de combustible y los impuestos son factores que contribuyen a la elevada cotización del ajo argentino.

De cara a la nueva campaña, Fusari resalta el cultivo de ajo colorado en el Valle de Uco, muy demandado en mercados como Brasil y Europa. La estrategia de distribución de la cosecha a lo largo de la provincia permite mitigar el impacto de las inclemencias climáticas en la producción total. Además, la implementación de secaderos y caballetes en el período post cosecha es fundamental para preservar la calidad del ajo frente a las lluvias abundantes.

Fuente: losandes.com.ar

Fecha de publicación: