En un operativo conjunto entre la Policía, la Dirección de Antinarcóticos (Diran), y agencias de Estados Unidos (HSI y CBP), se incautaron 1.607 kilogramos de cocaína en el puerto de Cartagena, Bolívar. La droga, oculta en un cargamento de fruta con destino a Sevilla, España, fue hallada en cuatro plataformas de madera que contenían 216 cajas de bananos, de las cuales 205 albergaban el estupefaciente. Según las investigaciones, el cargamento se transportó desde Caucasia, Antioquia, hasta la terminal portuaria.
¡Cocaína hasta con marquillas de la Virgen! En desarrollo de la ofensiva frontal contra el narcotráfico, en el puerto de Cartagena incautamos 1.607 kilos del alcaloide, camuflados entre un cargamento de banano con destino final Sevilla (España).
— General William René Salamanca Ramírez (@DirectorPolicia) February 3, 2025
Durante la operación policial,… pic.twitter.com/cu3GouqinY
Las autoridades identificaron irregularidades en la empresa importadora en España, creada hace solo ocho meses con un capital de 3.000 euros. La exportadora, con 83 envíos previos, refuerza las sospechas de su posible vinculación con el tráfico de drogas. El decomiso representa una pérdida estimada de más de 88 millones de euros para el Clan del Golfo y evita la distribución de cerca de cuatro millones de dosis en el mercado internacional. El Grupo TCIU de la Diran, mediante técnicas de perfilamiento, logró detectar y neutralizar el envío ilícito.
En un operativo anterior, el 22 de enero, la Diran lideró una operación en el puerto de Buenaventura, Valle del Cauca, incautando 8,2 toneladas de cocaína. Este cargamento, equivalente a 20 millones de dosis y valorado en 453 millones de euros, tenía como destino Toledo, España, con entrada a Europa por el puerto de Algeciras, Andalucía.
La droga estaba oculta en un envío de abonos minerales, utilizando una empresa fachada sin historial de exportaciones. Inspectores y analistas de carga detectaron patrones sospechosos que llevaron al hallazgo de irregularidades. Para evadir controles, los narcotraficantes emplearon material orgánico con fuerte olor a heces para camuflar la droga.
Las investigaciones revelaron que la empresa propietaria de la carga operaba bajo una aparente legalidad en el sector de fertilizantes y productos químicos, pero presentó múltiples señales de alerta en esta exportación. Las autoridades destacaron el uso de técnicas avanzadas de perfilamiento y análisis de riesgo que permitieron detectar el intento de tráfico y neutralizar la operación delictiva.
Fuente: elespectador.com