"Los productores gestionan instalaciones mucho más grandes que antes, pero debido a la falta de mano de obra disponible, el muestreo y las mediciones no han evolucionado al mismo ritmo que el tamaño del invernadero. Gracias a nuestra tecnología, los productores pueden escanear miles de plantas de manera uniforme", asegura Adam Greenberg, de iUNU. Los datos se utilizan para optimizar la estrategia climática, mejorar las previsiones de rendimiento o comprobar la calidad de la mano de obra. Estas actividades se extienden ya a los 5 continentes, y ahora llega una nueva ronda de financiación de 20 millones de dólares impulsada por S2G Investments ("S2G") y con la participación de Farm Credit Canada (FCC) y Lewis & Clark Partners. "Queremos seguir creciendo, darle un impulso al desarrollo de la IA y ampliar nuestra presencia comercial".
No es un momento fácil para reunir capital en el sector de la agricultura de ambiente controlado (AAC), pero iUNU lo ha conseguido con el respaldo de socios existentes y nuevos. Adam explica que quienes aportan dicha financiación perciben el mismo potencial que la creciente base de clientes de iUNU. "Nuestro sector es maravilloso y hay que lograr que crezca manteniendo la rentabilidad, pero no hay suficientes productores para conseguirlo. Ayudándoles y ofreciéndoles información sobre sus cultivos de manera sencilla, podremos ayudarles a ampliar su superficie y mejorar el control sobre sus cultivos. La energía y la mano de obra son los mayores generadores de gastos en los invernaderos y nuestra tecnología también puede ayudar a los productores a reducirlos".
iUNU se aventuró por primera vez a trabajar con invernaderos hace varios años en el sector de las hortalizas de hoja y ha ido creciendo en el sector vitícola desde el lanzamiento de su plataforma LUNA, un sistema robótico que lleva a cabo mediciones en los cultivos y una plataforma de datos impulsada por IA que ayuda a los productores a obtener información. "En los años 80, un productor podía gestionar dos hectáreas y monitorizar 20 plantas cada semana de manera manual. Ahora gestionan muchas más, pero resulta difícil reunir un conjunto de datos representativo. Por un lado, resulta caro y lleva mucho tiempo, y por otro, el proceso puede verse afectado por errores humanos".
Al automatizar el control de cultivos, se puede aumentar de manera considerable el tamaño de la muestra y se reducen los errores. "Estamos logrando un crecimiento del 330% en nuestro segmento de cultivos de vid", afirma Adam. "Al combinar sistemas basados en IA y una notable experiencia en la industria, estamos logrando una productividad, sostenibilidad y rentabilidad sin precedentes para la agricultura de ambiente controlado a nivel mundial".
Datos sobre el cultivo
La plataforma LUNA se basa en el uso de un robot que se desplaza por el invernadero y escanea los cultivos mediante cámaras. Este robot está conectado a una plataforma de datos que funciona con IA. Al ser un robot el encargado de monitorizar los cultivos, se puede ampliar de manera relevante la superficie a controlar. Adicionalmente, los controles pueden llevarse a cabo con mayor frecuencia, reduciéndose también el número de errores. Además, ya no es necesario introducir manualmente los datos en aplicaciones o archivos de Excel.
La propia LUNA ofrece una completa herramienta de análisis de datos en la que los productores pueden consultar con facilidad los datos más recientes sobre sus cultivos. "Muchos productores tienen siempre esta herramienta abierta junto a la del sistema de control climático".
Adam comenta que los datos también pueden reenviarse automáticamente a sistemas de control climático como los de Priva, Hogendoorn o Ridder. "De este modo, los productores pueden beneficiarse de nuestras herramientas sin que nosotros tengamos que hacernos cargo de sus controles climáticos. No queremos sustituir lo que hace el agricultor, sino ser su asistente en el cultivo, y ayudar a reducir costes".
Propiedad de los datos
Adam subraya que esto también significa que los datos siguen siendo propiedad del productor. "Nos enorgullece poder decir que respetamos la propiedad de los datos. Es algo muy importante para nosotros; los agricultores son los propietarios de sus datos. No tomamos su receta y la fusionamos con otras. La propiedad de los datos es importante, y nuestro objetivo es educar al sector al respecto. Deben mantenerlos y hacer buen uso de ellos. Nuestro papel es ayudarles a hacerlo; los datos no dejan de ser su propiedad".
Previsiones de rendimiento
Gracias a que las muestras son de un tamaño más representativo, también mejora la precisión de las previsiones de rendimiento. "Y cada punto porcentual de mayor precisión en una previsión de rendimiento significa más dinero; permite a los agricultores planificar sus programas de ventas con mayor precisión".
Controles de calidad de la mano de obra
Una función relativamente nueva de la plataforma Luna son los controles de calidad de la mano de obra. "El robot escanea de todos modos, así que nos planteamos qué más podíamos hacer con esos datos. Los controles de calidad de la mano de obra son algo que los agricultores sin duda querían", explica Adam. "De nuevo, la prioridad es disponer de más datos sobre el cultivo. Lo que importa no es si se ha completado una tarea, sino la calidad del trabajo, que influye mucho en los resultados finales, pero es difícil de controlar".
"¿Con qué precisión se ha hecho la poda? ¿Cuál es la calidad del trabajo de deshojado?", resume. "A menudo, el único dato disponible es si la tarea se ha completado, pero eso es algo subjetivo y no dice nada sobre lo bien (o mal) que se ha hecho. Cuando dispones de datos sobre el rendimiento, se puede mejorar el trabajo mediante primas para quienes más rinden, o ayudar a mejorar a quienes demuestran alguna carencia".
Crecer en el sector
Gracias al capital obtenido, la empresa está aumentando su presencia en el sector vitícola. "Vamos a continuar creciendo, tanto en tamaño como en presencia. Estamos contratando a ingenieros de IA y a comerciales residentes en Canadá y la UE", cuenta Adam. "Tenemos un enfoque específico para cada ubicación, ya que estoy convencido de que, para triunfar, es necesario tener presencia a nivel local. Para ayudarnos a crecer en los Países Bajos, lo mejor es trabajar con holandeses, y para hacerlo en Canadá, con canadienses".
Por ahora, esta estrategia ha permitido que la tecnología de iUNU se esté utilizando en 100 instalaciones de 18 países. "Lo que más me entusiasma es que estamos ayudando a los productores a controlar una superficie mucho mayor y recuperar el control sobre sus cosechas, no solo sobre una muestra".
Un segundo factor clave para permitir el crecimiento es aumentar la velocidad de desarrollo de la IA para KPI y métricas -y acabar logrando expandirse a nuevos mercados. "Somos la mayor empresa de captura de datos y muestreo del mundo en lo que respecta a datos, análisis y comprensión, y queremos llevar eso también a la tecnología intermedia".
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