La recolección de la sandía temprana en Almería entra en su fase final, con la mayoría de las fincas ya arrancadas y solo algunas pendientes en la Comarca de Níjar. Según el Observatorio de Precios y Mercados de la Junta de Andalucía, el balance de precios en origen pagados al agricultor durante esta campaña ha sido más favorable que en los últimos tres años.
Los datos recopilados indican que tanto la sandía rayada como la sandía mini han superado los valores medios de campañas anteriores. En el caso de la variedad rayada, durante abril —semanas 15, 16 y 17— se mantuvo por encima del euro por kilo, superando los registros de la pasada temporada, en la que no alcanzó los 80 céntimos. La sandía mini, muy demandada en Europa por su menor calibre, también ha registrado precios superiores al año anterior, aunque solo se acercó al euro por kilo en la semana 15, sin llegar a superarlo.
El melón amarillo, a pesar de la creciente competencia internacional, también ha tenido un buen comportamiento. En la semana 16 alcanzó un valor cercano a los 1,20 euros por kilo, y aunque en las semanas posteriores su precio descendió hasta situarse por debajo del año pasado, desde la semana 22 se estabilizó por encima de los 40 céntimos. En contraste con la sandía, cuyo valor ha caído en los últimos días, el melón ha mantenido su cotización estable.
El incremento en la demanda europea, impulsado por una entrada temprana del verano, ha favorecido el consumo de estas frutas españolas. Pese a que las lluvias durante la floración redujeron el volumen inicial de producción, los agricultores lograron recuperar la calidad del producto. Iniciativas como la campaña "La primera sandía europea", impulsada por Coexphal, han contribuido además a fomentar el consumo y poner en valor el origen del producto.
La campaña se desplazará ahora hacia el Levante almeriense, donde agricultores de localidades como Cuevas del Almanzora, Huércal-Overa y Pulpí afrontan la recta final de la temporada de sandía al aire libre, con la disponibilidad de agua como uno de los principales desafíos.
En cuanto a otros cultivos, la producción de berenjena protegida está próxima a finalizar, mientras que el calabacín en invernadero ha concluido su recolección. Durante junio comenzará la cosecha de calabacín al aire libre en diferentes regiones del país, que abastecerán el mercado durante los meses de verano. Con una oferta ya limitada de hortalizas bajo invernadero en Almería y Granada, otras comunidades autónomas han asumido el relevo productivo.
Fuente: diariodealmeria.es