"Las ventas de champiñones se mantuvieron sólidas durante todo el verano, pero desde el inicio del curso escolar, la demanda ha repuntado notablemente", comenta Noud van den Broek, director comercial de la empresa holandesa Banken Champignons. "Mientras el champiñón blanco mantiene un ritmo constante, el interés por el champiñón marrón no deja de crecer".
© Banken Champignons Melena de león.
Según Van den Broek, esta tendencia al alza es aún más evidente en las variedades exóticas, como el shiitake y la seta de ostra, y en menor medida en el portobello. El directivo confía en que la demanda de estas setas especiales seguirá aumentando, impulsada por el creciente interés del sector horeca y los mercados internacionales.
Uno de los factores clave para el consumidor actual, añade Van den Broek, es la comodidad. En su departamento de productos listos para el consumo, Banken Champignons corta y mezcla diferentes tipos de setas para ofrecer soluciones prácticas. "El hecho de que nosotros mismos cultivemos y procesemos el producto nos permite garantizar un flujo directo del campo al consumidor. Así, aseguramos frescura y una mayor vida útil", apunta.
Hacia cadenas más cortas y alianzas más sólidas
Van den Broek también observa un cambio estructural en la forma de operar dentro del sector: las cadenas de suministro se acortan y las colaboraciones se hacen más estrechas. "Apostamos por fortalecer las relaciones con los distribuidores y trabajar codo a codo con los retailers en la gestión por categorías. Les brindamos asesoría basada tanto en análisis de mercado como en nuestros propios datos internos", señala.
© Banken Champignons Enoki.
Además, el enfoque de la empresa pasa por anticiparse a las tendencias y fomentar el consumo de setas como alternativa vegetal al consumo de carne. "Desarrollamos conceptos que se adaptan a las distintas estaciones del año —como propuestas para barbacoas en verano, recetas navideñas o ideas para la temporada de caza— y que posicionan a los champiñones como una opción sabrosa y saludable frente a la carne", indica.
Compromiso con la reducción del desperdicio alimentario
Otro de los pilares en los que trabaja la empresa es la lucha contra el desperdicio alimentario, una preocupación compartida con sus socios comerciales. "Un envase bien pensado puede marcar la diferencia. Somos conscientes de nuestro papel dentro de la cadena y queremos ser parte activa de la solución. Por ejemplo, elaboramos 'carne' picada a base exclusivamente de champiñones frescos", explica el directivo.
"Nuestra filosofía es clara: no desperdiciar nada. Y queremos que el consumidor haga lo mismo. Por eso, promovemos el aprovechamiento de las sobras, inspirando en la cocina con ideas sencillas y sabrosas que tienen como base las setas", prosigue.
Liderazgo en sostenibilidad
Esta visión se alinea perfectamente con el fuerte compromiso de Banken Champignons con la sostenibilidad. La compañía cuenta con objetivos medioambientales avalados por la Science Based Targets Initiative, lo que refuerza su credibilidad en esta área. "El cultivo de setas es de por sí muy eficiente en términos de emisiones", afirma Van den Broek. "Si lo comparamos, por ejemplo, con la carne de vacuno, según la FAO, esta genera unos 27 kg de CO₂ por cada kilo producido".
© Banken Champignons
"Sustituir la carne por champiñones en la dieta supone un avance enorme hacia un modelo alimentario más sostenible y con menos impacto ambiental. Ahí está nuestro horizonte como empresa. El consumo de setas todavía tiene mucho margen de crecimiento, y todo apunta a que seguirá en esa dirección", concluye con convicción.
Para más información:
Noud van den Broek
Banken Champignons
Tel.: +31 24 36 67 451 (Países Bajos)
[email protected]
www.bankenchampignons.com