En Générac, en el departamento de Gard, se han construido dos nuevos invernaderos agrivoltaicos Reden en los terrenos de la empresa Domaine des Côteaux que albergan la nueva variedad de kiwi amarillo KiKoKà.
Con una superficie de 3,6 hectáreas, los nuevos invernaderos de Reden y Domaine des Côteaux tienen una capacidad instalada de 3,8 MW, produciendo casi 5,8 GWh de electricidad verde al año. Esta energía abastece a 1.300 hogares de los alrededores. Además de producir energía renovable, este proyecto se distingue por sus ambiciones agrícolas. Se trata de la plantación de una nueva variedad de kiwi amarillo: el KiKoKà. Gracias a las numerosas ventajas que ofrece el invernadero agrivoltaico, Domaine des Côteaux ha podido embarcarse en el desarrollo de esta especie emergente. Protegidos de los fenómenos meteorológicos, como el granizo, el viento, la lluvia excesiva o las grandes variaciones de temperatura, los cultivos tendrán una producción constante durante todo el año. Además de las ventajas agronómicas, los agricultores también ven mejoradas sus condiciones de trabajo.
Nathalie Bonnet, gerente de la explotación de Domaine des Côteaux, explica: "Estos invernaderos agrivoltaicos nos han permitido cultivar la nueva variedad de kiwi KiKoKà en condiciones particularmente favorables. Los primeros resultados son muy alentadores, con frutas de gran calidad y un importante potencial de desarrollo comercial. Es un modelo en el que todos ganan: Reden aprovecha la electricidad producida por los paneles solares instalados en los tejados de los invernaderos, mientras que nosotros, los productores, nos beneficiamos de una herramienta moderna adaptada para asegurar y optimizar un cultivo exigente. Se trata de un nuevo paso para diversificar nuestra plantación y satisfacer la creciente demanda del mercado de kiwis amarillos premium".
Olivier Bousquet, director ejecutivo de desarrollo en Francia de Reden, concluye: "Este proyecto demuestra que la agrivoltaica puede responder a los retos climáticos y económicos a los que se enfrentan los fruticultores. Los invernaderos de Générac no son un caso aislado: ilustran un modelo sostenible y reproducible, que abre nuevas perspectivas para la producción local al tiempo que refuerza la transición energética. Estamos orgullosos de apoyar la introducción del kiwi amarillo KiKoKà en Gard, aportando una solución que beneficia tanto a los agricultores como a la región".
Para más información:
https://reden.solar/
