El futuro de Frutas Lozano, una de las principales empresas hortofrutícolas de Fraga (Huesca), vuelve a quedar en el aire. La Audiencia Provincial de Huesca ha decidido revocar el plan de reestructuración aprobado el año pasado para reflotar la compañía, al estimar un recurso del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI), dependiente del Ministerio de Ciencia.
La clave está en la naturaleza del préstamo que el CDTI concedió a la empresa: el tribunal lo ha reclasificado como crédito público, y no privado, lo que impide aplicar las quitas previstas en el plan. Este cambio altera el equilibrio entre los grupos de acreedores y obliga a rediseñar toda la propuesta de rescate.
Frutas Lozano emplea a unas 40 personas de forma fija y eleva su plantilla hasta 200 durante la campaña de recolección. Con una facturación cercana a los 8 millones de euros anuales, la compañía acumulaba una deuda de 15 millones con una docena de bancos y medio centenar de proveedores —en su mayoría de Lleida y la Franja— cuando en 2023 acudió al preconcurso de acreedores para evitar la liquidación.
El Juzgado de lo Mercantil de Huesca había aprobado entonces un plan de continuidad respaldado por los acreedores comerciales e industriales, pero rechazado por la banca, que apostaba por vender los activos. Los proveedores aceptaban condonar el 60% de lo adeudado y recuperar el resto en dos años. Los bancos, por su parte, asumían pérdidas sobre los cuatro millones avalados por el ICO, mientras que otros siete millones se transformaban en créditos participativos a devolver a partir de 2029 si la empresa superaba 1,5 millones de beneficios anuales.
La decisión de la Audiencia reabre ahora el proceso. La empresa dispone de tres meses, prorrogables por otros tres, para presentar un nuevo plan, durante los cuales no podrán ejecutarse las deudas, salvo las del propio CDTI.
Entre tanto, los acreedores financieros siguen presionando por la liquidación, mientras que los proveedores y acreedores industriales mantienen su apoyo a la continuidad. Las deudas con la Agencia Tributaria y la Seguridad Social, al tener carácter privilegiado, seguirán un calendario de pago independiente.
El recurso del CDTI ha generado sorpresa entre juristas, que consideran que su función debería ser precisamente la de facilitar la recuperación de empresas con potencial de viabilidad.
"Por su naturaleza, debería apoyar la reestructuración de las empresas viables aunque atraviesen dificultades financieras transitorias", apuntan fuentes del sector.
Fuente: segre.com
