La reaparición de millones de ninfas en la comunidad de Tunalito, poniendo en riesgo alrededor de 20 hectáreas de cultivos de hortalizas, desató la preocupación de pobladores y autoridades del municipio de Cabezas, en Santa Cruz.
Según el alcalde de Cabezas, Rodolfo Vallejos, el rebrote de esta plaga en la comunidad próxima al Río Grande, alarmó a los productores que realizan “grandes esfuerzos” para mantener sus cultivos.
“La plaga había desaparecido, pensábamos que habíamos reducido a la langosta, pero este rebrote nos dice que la está y al parecer ya se ha aclimatado en la zona”, explicó Vallejos, a tiempo de mencionar que hay importantes cantidades de huevos que están próximos a eclosionar si es que no se realizan los trabajos de remoción de suelos de manera inmediata.
Vallejos agregó que los trabajos de fumigación disminuyeron en relación a los primeros meses de presencia de langostas, sin embargo, dijo que los técnicos del municipio y del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) retomaron el trabajo para evitar la expansión y crecimiento de los insectos.
Añadió que si los insectos ingresan en etapa adulta adquieren la capacidad de volar, lo que complica las tareas de control.
Respecto al presupuesto de 59 millones de bolivianos destinados por el Gobierno nacional para la puesta en marcha del Programa Nacional contra la Langosta, Vallejos indicó que será necesario optimizar dichos recursos en función a la experiencia adquirida en los meses pasados, sobre todo si la aplicación de insecticidas vía aérea fue realmente efectiva, ya que de lo contrario se podrían seguir otras estrategias menos costosas.
