La Unión Europea ha tomado la decisión unánime de ampliar las sanciones impuestas a Rusia otros seis meses. Estas sanciones entraron en vigor en 2014 debido a la participación de Rusia en el conflicto en el este de Ucrania y a la anexión de Crimea. Esta misma semana, ya se habían prolongado las sanciones contra Crimea. Pese a los varios acuerdos y conversaciones en Minsk, ha sido imposible mejorar la situación en el este de Ucrania.
Donald Tusk.
En una conferencia de prensa, la canciller alemana Angela Merkel ha destacado los intentos de lograr un alto el fuego en el este de Ucrania. "Por desgracia, debemos admitir que se han observado pocos progresos. El alto el fuego se quebranta continuamente". Todavía no ha habido respuesta oficial de Rusia, pero varios políticos tienen una opinión negativa sobre esta decisión, pues aseguran que Rusia no está involucrada en el conflicto y que Ucrania está guiando a la UE hacia una política antirrusa.
Según los expertos, las sanciones financieras y económicas que Europa ha impuesto a Rusia ya le están costando a la economía rusa miles de millones de euros. En respuesta a las sanciones económicas, Rusia cerró sus fronteras a las frutas y hortalizas de la UE, entre otros productos. El veto sigue vigente. El año pasado, Rusia amplió el veto hasta finales de 2017 después de que la UE prolongara las sanciones medio año. Por ello, se prevé que Rusia amplíe el veto, situación que lleva repitiéndose desde 2014. Que el Kremlin decrete el fin del veto está siempre vinculado al levantamiento de las sanciones impuestas por la UE. Europa es quien debe dar el primer paso, Rusia dará el siguiente; este es el mensaje que se ha transmitido.