Los rusos empiezan a hacer acopio de reservas
Durante una conferencia de prensa de tres horas, Putin señaló a Occidente como responsable de la actual situación económica en Rusia. En cuanto a eso, en realidad Putin no estaba diciendo nada nuevo y a su vez defendió sus políticas y las políticas de los bancos. Después hizo referencia a la metáfora del oso, a menudo utilizada en Occidente para describir a Rusia, y afirmó que sus garras habían sido recortadas y sus dientes limados mientras el oso estaba comiendo bayas tranquilamente en los bosques.
¿Echando leña al fuego?
Decir que a Rusia no le gusta que Europa haya estado haciendo tratos con los países en su patio trasero es un eufemismo. Los últimos tres años han demostrado que Rusia siempre ha reaccionado ante estas situaciones; Georgia y Ucrania son sólo dos ejemplos. Es este impulso de expansión el que se encuentra parcialmente en el corazón del conflicto. Ayer, el Parlamento Europeo ratificó un acuerdo de cooperación entre Georgia y la UE. Georgia es el tercer país en firmar este tipo de acuerdo en los últimos meses; Moldavia y Ucrania ya lo hicieron antes.
El acuerdo de cooperación define la cooperación política y el alcance de la integración económica entre la UE y Georgia. El acuerdo se aplica a toda Georgia, incluida a la ocupada por Rusia, Abjasia y Osetia del Norte. El Parlamento Europeo también ha pedido a Rusia que recuerde la alianza estratégica que hizo con Abjasia.
Los separatistas en Osetia del Sur han reaccionado a la firma publicando su propia propuesta, según la cual la región de Georgia se uniría a Rusia. La propuesta de tratado cede componentes importantes como la política, el ejército y las patrullas fronterizas a Rusia. Además de eso, la frontera entre Rusia y Osetia del Sur se abriría a la libre circulación de personas sin necesidad de comprobaciones. Los sentimientos separatistas han aumentado en la zona tras los planes de Crimea y el este de Ucrania de unirse a Rusia.
Manzanas moldavas para la UE
Los miembros del Parlamentos también han apoyado una propuesta que regularía la importación de manzanas, uva y ciruelas moldavas. Moldavia recibirá permiso para exportar 40.000 toneladas de manzanas, 10.000 toneladas de uva y 10.000 toneladas de ciruelas a Europa sin impuestos de importación. Estos volúmenes rondan el 0,4%, 0,6% y 0,7%, respectivamente, de los volúmenes de producción europeos. Según las estimaciones, la mayor parte de esas exportaciones irá al mercado rumano. La mayoría de las exportaciones moldavas, el 90%, ya se destinaba al mercado europeo, aunque los productos hortofrutícolas forman parte del 10% al que se aplican las restricciones.
Por otra parte, una delegación del Ministerio de Agricultura moldavo ha visitado Rusia para negociar un levantamiento de las sanciones. Moldavia también está incluida en el boicot y el país trata de abrir las fronteras rusas con estas negociaciones.
Se investigan las implicaciones del boicot para los precios
El instituto de investigación LEI (del Centro de Investigación de la Universidad de Wageningen, Países Bajos) ha investigado los efectos del boicot en los tres principales productos de exportación: los tomates, las manzanas y las peras. El estudio ha comparado los movimientos de precios tras el boicot con periodos comparables. Se ha concluido que el boicot apenas ha tenido ningún efecto sobre la exportación de tomates. El boicot empezó cuando el pico de la exportación ya había tenido lugar y los volúmenes de exportación son prácticamente idénticos a los de años anteriores en los meses siguientes. La conclusión para manzanas y peras es que la tendencia de precios no ha sido tan buena en los últimos años, siendo la principal causa unas cosechas abundantes. La exportación total de manzanas es más baja debido a la gran oferta en el mercado europeo, que está parcialmente causada por el boicot. Los volúmenes de exportación de peras han permanecido estables, por tanto, los efectos del boicot no se reflejan en las cifras.
Los comerciantes turcos, al borde de la quiebra
El sector agrícola en Turquía había esperado beneficiarse del boicot y ampliar su cuota de mercado en Rusia, pero ahora que el valor del rublo ha caído, la quiebra planea sobre las compañías. Los exportadores que vendían a crédito en rublos hacen malabarismos al borde de la ruina. La moneda rusa ha perdido docenas de puntos de su valor, lo que ha tenido un efecto negativo para los exportadores turcos que suministraban con plazos de pago a tres meses. Los exportadores han emitido un comunicado con el que se pide a gritos una intervención para evitar las quiebras.
Los rusos empiezan a hacer acopio de reservas
Con el rublo en caída libre del rublo a principios de semana, además de las perspectivas negativas, los rusos han empezado a hacer acopio de reservas. El valor de la moneda en las cuentas de ahorro no está asegurado y, mientras, suben los precios en los supermercados. Los productos de importación, en particular, están encareciéndose rápidamente. Según los medios locales de Moscú, los habitantes están comprando café y té en cantidades masivas. El director de Auchan Rusia afirma que negocia con los proveedores cada subida de precio, por lo que la compañía no aplica una regla general.
¿El doble de malo para Israel?
Los exportadores y los emprendedores de Israel mantienen lazos estrechos con Rusia y, por ello, la espiral de caída en la que se ve la economía rusa también puede tener efectos negativos para Israel. En la exportación de alimentos preparados del país, que tiene un valor de 950 millones de dólares, el 6% tiene como destino Rusia. Rusia también es un mercado importante para otros sectores. El comercio con Europa es cada vez más delicado ahora que su postura en el conflicto Israel-Palestina parece estar cambiando. El mercado ruso parecía una buena alternativa.