"Nos proponemos ser competitivos en todos los extremos del mercado, y eso incluye abrir el precio en todas las categorías".
Lewis inició el proceso de generalizar el recorte de precios en enero y opina que el mayor minorista del Reino Unido, con una cuota de casi el 30 por ciento en el mercado de la alimentación, puede recuperar su supremacía en el Reino Unido.
Tras el escándalo del reconocimiento de ingresos procedentes los minoristas, sujeto de una investigación de la oficina de investigación de fraudes, Lewis se ha embarcado en una ofensiva amistosa.
"Me he reunido con sesenta de nuestros principales proveedores y sus directores generales para hablar sobre sus experiencias en los negocios y para compartir con ellos cómo quiero que funcione Tesco", dice.
Lewis deja claro que el Tesco Bank forma parte integral del futuro del minorista. "Es un banco con muy buen rendimiento", asegura.
El director general, que trabajó en Asia para Unilever, se mostró altamente comprometido con las actividades en Corea y Tailandia, pero expresó su decepción con Europa central diciendo que "ese negocio nunca ha cubierto el coste de capital".
Reconoce que uno de sus mayores retos es reducir los niveles totales de deuda (incluido el déficit de fondos de pensiones) que actualmente totalizan 22.000 millones de libras.