La falta de competitividad y la apreciación del dólar están derrumbando los cupos de exportación de plátano en el país.
Según explicó Hubert Garzón, jefe de operaciones de la exportadora Delmonte, del cantón El Carmen, desde el 2014 las exportaciones de este producto se han reducido en un 40%. Esto, dijo, obedece a la falta de competitividad con los precios de otros países productores, entre otros aspectos en los que no entró en detalles.
“Otros países productores de plátano como Guatemala o Panamá, por ejemplo, invierten menos dinero para hacer llegar el producto a los mercados de consumo como Estados Unidos y Europa, pues no pagan, por ejemplo, el paso por el canal de Panamá; eso hace que su producto llegue a un precio menor que el nuestro”, dijo Garzón.
Calidad
La calidad del producto es otra situación que incide también en la disminución de los cupos de exportación, según Garzón. “La mayoría de pequeños productores hace caso omiso a las recomendaciones que se les da para mejorar la calidad del plátano, y esto también afecta a las exportaciones”, afirmó.
“Necesitamos instaurar una marca país para nuestro plátano y eso depende mucho de que tengamos un producto de calidad, porque al final el que gana o pierde no son las exportadoras, sino el país”, sentenció el exportador.
Productores
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Plátano de Exportación, Rafael Torres, coincidió en parte con lo dicho por Garzón. Él está al tanto de la realidad ecónomica que vive el país y concuerda con los factores que inciden en la baja de las exportaciones.
Sin embargo, señaló que esta crisis también es provocada por el incumplimiento del pago referencial por parte de los intermediarios, que, según manifestó, comercializan el 95% de la producción total del cantón con las exportadoras.
Precisamente esta situación hizo que los productores paralizaran los cortes de la fruta. “Lo hicimos ante la amenaza de los exportadores de querernos pagar la caja a 5 dólares, cuando se la estaba pagando a 9. Fue una decisión urgente que tomó la federación para evitar este abuso”, dijo Torres, quien además reconoció que el sector exportador está deprimido, “pero no para querernos pagar estos precios”, indicó.
Torres agregó que, aunque “el precio referencial es de 7,30 $, no se cumple el pago de este valor, pues los intermediarios dicen que los exportadores no les pagan el precio oficial y que por eso pagan 5 $, y los exportadores dicen que sí lo pagan, y así se pasan la pelotita”.
Motivación
El incumplimiento del pago referencial está desmotivando a los pequeños productores, pues no invierten en el mejoramiento de sus cultivos, según explicó Israel Pineda, gerente de Agrocalidad de AgroCaribe.
“El costo de producción de una caja de plátano está por los 5 dólares, y la venden a 5,50 o 6 dólares, esto hace que los pequeños productores no vean mayor rentabilidad en sus plantaciones y por eso a lo mejor deciden no invertir en sus plantaciones, lo que perjudica a la producción y la calidad del producto”, dijo Pineda.
Esta aseveración encuentra respaldo en Gilberto Mendoza, quien cultiva 2 hectáreas de plátano.
Aunque no es el caso de él, asegura que la gran mayoría de pequeños productores deja que sus plantaciones produzcan en forma silvestre, es decir, sin invertir para mejorar la producción.
“De esta manera, solo producen entre cuatro y cinco cajas, cosa que no es negocio por ningún lado”, dijo Mendoza.
Asociatividad
Para hacer frente a la realidad de los productores, el Magap está construyendo centros de acopio de plátano que son administrados por los propios productores.
Uno de estos centros de acopio que ya está operativo es el Corpisupal, ubicado en Las Palmitas de Agua Sucia, en El Carmen.
Aquí, más de 30 pequeños productores de plátano se han asociado para comercializar directamente con las exportadoras el producto.
De esta manera ellos reciben el pago del valor referencial, sin necesidad de intermediarios, según explicó Freddy Mendoza, administrador de este centro de acopio. “Estos centros de acopio se han convertido en una oportunidad para nosotros los pequeños productores, pues entregamos directamente a las exportadoras. De esta manera tenemos un margen de utilidad justo y podemos reinvertir en nuestras plantaciones”, dijo.
Fuente: eldiario.ec
