La temporada de arándanos del hemisferio sur, con especial enfoque en Chile y Argentina, se acerca a su conclusión, marcando momentos significativos para la industria. En Argentina, la campaña finalizó con los últimos envíos en enero, destacando una temporada favorable en términos de precios, impulsada por una demanda robusta y la disminución de la producción en Perú. Jorge Pazos, presidente de la Cámara de Exportadores de Arándanos de Argentina (ABC), resaltó la estrategia de envíos 100% aéreos, adaptándose a las necesidades del mercado y alcanzando un total de 15.000 toneladas exportadas.
Por otro lado, Chile experimentó un aumento en sus exportaciones de arándanos, superando las expectativas iniciales con un volumen final sobre las 86.000 toneladas. Andrés Armstrong, director ejecutivo del Comité de Arándanos de Frutas de Chile, mencionó un ajuste en las proyecciones debido al impacto de El Niño, pero una estrategia de mercado orientada a capturar mejores precios llevó a un incremento en los envíos. Sin embargo, desafíos climáticos y una recuperación en la producción de Perú hacia el final de la temporada plantearon retos en cuanto a calidad y precios.
Ambos países enfrentaron desafíos únicos durante esta temporada, desde la gestión de la calidad de la fruta hasta la adaptación a las fluctuaciones del mercado global. La importancia de mantener altos estándares de calidad y diferenciación, mediante la responsabilidad social y la reconversión de variedades, fueron aspectos clave mencionados por Pazos en Argentina. Mientras tanto, en Chile, la necesidad de preservar la imagen de calidad en el mercado fue subrayada por Julia Pinto, gerente técnico del Comité de Arándanos, especialmente hacia el cierre de la temporada.
Los mercados de destino para los arándanos chilenos muestran una preferencia significativa por EE. UU., seguido por los Países Bajos e Inglaterra. Armstrong señaló un notable aumento en los envíos aéreos hacia EE. UU., impulsado por la demanda del mercado y la disminución de la oferta, lo que refleja una adaptación estratégica ante las circunstancias del mercado.
En resumen, la temporada 2023-2024 de arándanos en el hemisferio sur evidencia la dinámica y los retos del comercio internacional de frutas, donde la calidad del producto, la adaptación a las condiciones del mercado y la gestión de los desafíos climáticos juegan roles fundamentales en el éxito de las exportaciones.
Fuente: argblueberry.com