En Hungría, la llegada del tiempo primaveral, más cálido, y la reducción de días con temperaturas bajo cero apuntan a que se retornará a una cosecha de albaricoques potencialmente normal por primera vez en más de tres años, según los productores del país. "Si se mantiene el calor el resto de la primavera, el sector del albaricoque podría ver cierta recuperación después de tres años de daños por heladas y desastres que afectaron hasta el 30% de la producción", plantea Máté Tömösváry, de la cooperativa Balaton-ker-Tész.
"Los albaricoques tienen muy buena pinta. Los últimos años hemos sufrido algunos daños por heladas durante el invierno. Cada año, los meses de diciembre y enero eran un poco más cálidos y luego se instalaban unas temperaturas muy frías durante febrero y marzo. Para cuando llegaba la primavera, ya teníamos unos daños del 20-30%. Cada año tenemos alrededor de diez u once días de heladas dañinas; este año solo tuvimos tres, cuando las temperaturas bajaron de los 0 grados. Ahora, hay una posibilidad muy pequeña de que se produzcan heladas en las próximas semanas. Esperamos tener una buena temporada normal por una vez", dice un esperanzado Tömösváry.
Explica que los efectos de los daños, temporada tras temporada, han comenzado a pasar factura en los ingresos de los productores. "Ahora hace buen tiempo, los últimos tres años no han sido buenos para nosotros en Hungría. Sin embargo, durante estos últimos tres días, las heladas ya han causado algunos grandes daños en los huertos de albaricoques en el centro y norte de Hungría. En nuestras plantaciones junto al lago Balatón, las condiciones son normales este año. Aunque no somos los mayores productores, debido a los daños en otras regiones, la nuestra cobra más relevancia".
Tömösváry dice que esperan comenzar la cosecha de albaricoques a finales del próximo mes. "Esperamos poder comenzar la cosecha con las variedades tempranas a finales de mayo. Exportamos a Alemania, República Checa, Eslovenia y Eslovaquia, y los principales países de la UE. Si la producción es buena, enviaremos también a países del norte como Lituania. Si no sucede nada este año, el mercado húngaro será interesante. Algunos compradores ya nos han visitado. Los mercados de exportación están listos cada año para recibir nuestra producción. Esperamos alcanzar también las 3.500 toneladas este año, como hace dos".
La producción húngara supera las 10.000 toneladas. Balaton-ker-Tész también cosecha y exporta entre 500 y 800 toneladas de cerezas, así como ciruelas y guindas, cerca de 1.500 toneladas. Tömösváry explica que no está mal volver a cosechar unos volúmenes más altos de albaricoques. "Pero no significa que los precios vayan a ser más bajos. El mercado nos mostrará en los primeros días cuál será el nivel de cotizaciones", afirma Tömösváry.
Para más información:
Máté Tömösváry
Cooperativa Balaton-ker-Tész
Tel.: +36 20 422 7200
balatonkertesz@gmail.com