La comercialización de fresas de invernadero holandesas lleva ya un par de semanas tomando impulso gradualmente. "Debido al frío y la lluvia, la temporada está teniendo un arranque algo lento, con volúmenes limitados para el mercado libre. Dado que se observa también cautela en la demanda, se mantiene un buen equilibrio entre la oferta y la demanda. Por ahora, nos estamos enfocando principalmente en las variedades Fandango y Sonsation. Sin embargo, tenemos ya ganas de poder ofrecer la gama completa, que incluye variedades como Opera, Favori, Elsanta o Malling Centenary. Estas van a ir llegando poco a poco al mercado", explica el exportador holandés Jeroen Hendrix.
Gracias a las variedades tempranas Inspire y Lady Emma, este año se ha logrado una mejor distribución y se está pudiendo alargar la temporada de fresas de invernadero holandesas a entre 10 y 12 semanas. Hendrix explica: "La fresa de invernadero es un producto de nicho, sobre todo en el segmento temprano. El producto es muy popular en los mercados semanales alemanes y en tiendas especializadas en la venta de frutas y verduras. A medida que avanza la temporada, sin embargo, los volúmenes de producto holandés aumentan, mientras que la oferta de España e Italia disminuye. La influencia de las condiciones meteorológicas es crucial en este sentido".
Según Jeroen, la fresa de invernadero holandesa va ganándole terreno poco a poco a la fresa del sur de Europa en el mercado alemán. "La logística y el transporte son, por supuesto, un factor clave en materia de costes. Las distancias relativamente cortas que recorre el producto tras su venta, que garantizan la frescura, otorgan una ventaja en comparación con los países productores del sur de Europa. Eso sí. Los problemas con el calor persistente y la falta de agua están afectando negativamente al cultivo de fresas en el sur de Europa, por lo que preveo una buena posición de salida para la fresa de invernadero holandesa también en los próximos años".
La Fandango está en auge. La Elsanta mantiene su posición en el mercado
En los últimos años, la superficie total de cultivo de los proveedores se ha mantenido más o menos estable, comenta Jeroen, que obtiene su fruta de unos cuantos socios a nivel local. Sin embargo, en materia de variedades, se han estado produciendo algunos desarrollos. "Sobre todo la Fandango goza de gran aceptación en el comercio diario alemán, aunque esta variedad se sitúa en el rango de precios más alto. Eso sí, una variedad algo más antigua como la Elsanta sigue logrando buenos resultados en términos de rendimiento y calidad cuando se utilizan buenos métodos de cultivo. Por otro lado, la Sonata ha ido perdiendo bastante terreno con los años".
A pesar del gran éxito de las fresas de invernadero holandesas en el mercado alemán, la superficie de invernadero también está creciendo poco a poco en Alemania. "En mi opinión, es bueno para el consumidor alemán que haya distintas opciones. La demanda en Alemania sigue siendo muy superior a la oferta nacional, por lo que la importación es necesaria. Además, la fresa de invernadero holandesa es conocida por sus altos estándares de calidad. En ese sentido, el producto también goza de una buena posición competitiva a largo plazo", concluye Jeroen.
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