Los mercados estuvieron suficientemente abastecidos con las fresas griegas y holandesas, las predominantes, seguidas de la oferta italiana y española, según la Agencia Federal para la Agricultura y la Alimentación de Alemania (BLE), aunque este último origen fue muy limitado en la semana que nos ocupa, la 16. La disponibilidad de lotes nacionales, por otro lado, se había ampliado significativamente y Bélgica participó solo con cantidades menores. El mal tiempo había restringido notablemente las posibilidades de almacenamiento. Aun así, las cotizaciones tendieron a subir al inicio de la semana. A partir del miércoles, se observaron descuentos en muchos lugares, antes de que los precios volvieran a subir puntualmente nuevamente el viernes. Los productos holandeses, belgas y nacionales fueron los más caros, a una distancia considerable de la competencia. Los lotes italianos desaparecieron de la gama en Colonia durante la semana; en Berlín, presentaron una calidad bastante heterogénea. Los productos españoles costaban solo 1,20 EUR por tarrina de 500 g en Fráncfort. En Múnich, su relevancia era más bien escasa, ya que la mercancía estaba vinculada a programas de los supermercados de descuento.
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Manzanas
Predominó el producto alemán, siendo Elstar, Jonagold, Braeburn y Boskoop la base de la oferta. La oferta italiana completó la oferta, mientras que el de origen francés, polaco, holandés y belga solo tuvo un carácter complementario.
Peras
Predominó la oferta sudafricana, en especial Abate Fetel, Packham's Triumph y Rosemarie. De Argentina llegaron sobre todo Abate Fetel y Williams Christ, y de Chile, Abate Fetel.
Uvas de mesa
Destacó la fruta sudafricana, seguida de la india, chilena y peruana. La comercialización transcurrió de manera tranquila, y la demanda se satisfizo sin dificultades.
Limones
Predominaron los Primofiori y Verna de mayor calidad de España, mientras que las mercancía turca y griega tuvieron a lo sumo un carácter complementario. En Colonia y Múnich, solo había oferta española.
Bananos
En Hamburgo, las cotizaciones se mantuvieron constantes gracias al buen equilibrio entre oferta y demanda. En Colonia, solo la primera marca de Costa Rica se encareció.
Coliflor
La gama se componía principalmente de lotes alemanes, italianos y belgas. Los candidatos nacionales empezaban a reemplazar las importaciones de Italia y Francia. Estas últimas completaron la gama de productos, en la que las partidas españolas y holandesas jugaban solo un papel mínimo.
Lechugas
Había lechugas arrepolladas de Alemania, Bélgica e Italia, y también lechugas pigmentadas francesas. En cuanto alas lechugas Iceberg, solo había artículos españoles. La disponibilidad, en general, era suficiente para satisfacer la demanda.
Pepinos
Los mercados estuvieron bien abastecidos con pepinos largos nacionales, holandeses y belgas, especialmente los belgas en todos los calibres habituales. El mercado nacional presentaba calibres más pequeños. España se había retirado de la comercialización.
Tomates
Había disponible una amplia gama de productos de multitud de países. Además de los principales importadores, los Países Bajos y Bélgica, España siguieron desempeñando un papel importante, seguido en importancia por Italia.
Pimientos
La temporada española está llegando a su fin: la calidad de la oferta ya no resultaba convincente y desapareció puntualmente del mercado, desplazada en general por el producto holandés en su mayoría.
Espárragos
Continuaron predominando claramente los turiones nacionales, las importaciones europeas jugaron a lo sumo un papel secundario. España e Italia estuvieron presentes sobre todo con producto verde, y Países Bajos y Grecia con producto blanco.
Fuente: BLE