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Países Bajos

En Vlissingen se mueven millones de cajas de bananas

En 2015, el gigante bananero Chiquita decidió dejar de navegar hasta Amberes y desembarcar sus bananas en Vlissingen. El año pasado, también se canceló el servicio a Bremerhaven. Esto fue positivo para el puerto de Zelanda y, en especial, para Kloosterboer, que desde entonces se encarga de la gestión de estas bananas. La filial de Vlissingen, dentro del grupo Kloosterboer, se ha convertido en un centro bananero gracias a la llegada de Chiquita.

Actualmente, una gran parte de la nave destinada a frutas y hortalizas de Kloosterboer Vlissingen se utiliza para la gestión de las bananas. Todos los días amarra un buque donde las bananas han estado almacenadas debajo de la cubierta y sobre esta (en contenedores). Cada semana se desembarcan a través de Kloosterboer cientos de miles de cajas y después de, entre otras cosas, llevar a cabo las inspecciones de calidad, el despacho de aduanas y otros pasos necesarios, las bananas se distribuyen desde Vlissingen por toda Europa. "En su mayoría, las bananas llegan a Vlissingen vía buques frigoríficos convencionales, pero este producto cada vez se transporta en contenedores más a menudo y es una tendencia clara", explica Marco Vermet, gerente comercial de frutas y hortalizas frescas en Kloosterboer. 



Grandes volúmenes
El proveedor de servicios de logística tiene muchas sucursales a su disposición, tanto en Países Bajos como en el extranjero. En esta red, cada una de ellas tiene sus puntos fuertes y responsabilidades especiales, para que los demandantes de servicios puedan elegir la opción que mejor se adapte a sus necesidades. "La de Poeldijk, Varekamp Coldstores, es un centro importante para la distribución de frutas y hortalizas con fuertes opciones de grupaje, gracias a la combinación de los flujos de importación y exportación". La sucursal de Maasvlakte se utiliza, sobre todo, para productos congelados como patatas fritas. "Esa sucursal tiene mucho potencial, pero tiene una conexión (todavía) menor con la categoría de frutas y hortalizas frescas por las opciones requeridas de distribución. No es el caso de los flujos de frutas y hortalizas frescas mayores, que utilizan principalmente envíos FTL (de carga completa), y debido a la proximidad de terminales de contenedores más grandes, es más lógico que las bananas se expidan de esta forma.

"Vlissingen también tiene sus puntos fuertes en cuanto al servicio logístico de bananas. Por ejemplo, navegando a Vlissingen en lugar de a Amberes, una naviera no tiene que llegar tan lejos y, por lo tanto, ahorra en tiempo y costes, y, además, se beneficia de un alto nivel de servicio. Cabe destacar que en Vlissingen no hay congestión en los puertos ni en las carreteras de acceso, lo que a menudo ocurre en otros puertos", expone Vermet.



"Cuando un barco no llega directamente a Vlissingen, sino a uno de los puertos cercanos como Róterdam o Amberes, preferimos ir a buscar la mercancía en barcazas para su posterior transporte a Vlissingen. Por norma, el transporte en barcaza es mucho más barato que el transporte por carretera, ahorra al menos la mitad de emisiones de dióxido de carbono y la manipulación es muy eficiente", añade. Además, Vlissingen funciona como almacén de contenedores para la mayoría de las navieras, por lo que los contenedores solo tienen que hacer el viaje a Vlissingen, en lugar de devolverlos vacíos a un almacén situado en otro lugar.

Condiciones de almacenamiento controladas
"En el segmento de la fruta, las bananas son una categoría independiente", continúa Vermet. "Las condiciones de almacenamiento, con la temperatura correcta, purificación de aire y circulación, y protección de la influencia del etileno, son esenciales para este producto. Se requiere precisión y pocas veces supone una sinecura". Además de las instalaciones de Vlissingen y Maasvlakte 2, también está la nueva sucursal Cool Port Rotterdam, que abrirá en mayo, una nueva opción dentro de la red de Kloosterboer para la gestión de los envíos de bananas.

La empresa familiar Kloosterboer, fundada en 1925, es originalmente una empresa comercializadora de frutas y hortalizas frescas del norte de Holanda y, en estos momentos, está dirigida por la tercera generación. La empresa pasó de ser una empresa comercial a una de almacenamiento frigorífico. En los 60, se abrió el primer almacén frigorífico en Elst y, actualmente, se ofrece toda la gama de servicios logísticos.

Agua, raíles y asfalto
Esta proveedora de servicios logísticos es mucho más que un almacén frigorífico en la actualidad. Las formalidades aduaneras, las inspecciones de calidad, el envasado y el transporte son solo algunos de los servicios ofrecidos por Kloosterboer. "En principio, supervisamos toda la cadena de suministro logística y somos capaces de dirigir la cadena desde, por ejemplo, la plantación en Sudáfrica hasta el cliente final en Alemania, incluidas todas las etapas logística necesarias".

A pesar de que Vlissingen y el resto de sucursales de Kloosterboer sacan partido de sus puntos fuertes, también hay gran cantidad de frutas y hortalizas frescas que no pasan por Kloosterboer. "A partir de una estrategia de crecimiento clara, queremos tener una participación más frecuente y, por tanto, vamos a abrir una nueva sucursal en Eemhaven, Róterdam, llamada Cool Port Rotterdam", explica Vermet la elección de Róterdam. Aunque Kloosterboer tiene un almacén frigorífico en Maasvlakte 2, este está a unos 50 kilómetros de un punto caliente para las frutas y hortalizas frescas como el centro de comercio de Barendrecht. Con Cool Port Rotterdam, Kloosterboer abre una filial a tiro de piedra.

"Eso se traduce en ahorro de costes y en la combinación de todos los puntos fuertes del resto de sucursales en Cool Port". Cool Port disfruta de una conexión trimodal: frente al edificio, agua; por detrás, tiene conexión ferroviaria y, justo detrás de ella, se encuentra la A15.

"Se podría decir que es el concepto de Vlissingen, pero adaptado a Róterdam. Preferimos una conexión a través de terminales de aguas profundas, como en el caso de Vlissingen, mediante barcaza, que se prevé que suministren y retiren contenedores varias veces al día. Los almacenes de contenedores vacíos de la mayoría de las navieras están próximas a la zona de Eemhaven. Además, esperamos ser capaces de generar los envíos de vuelta necesarios para que los contenedores vacíos se puedan volver a cargar de inmediato. Es una situación ventajosa para todas las partes".

Kloosterboer también espera que la importancia del transporte ferroviario se incremente. "Al fin y al cabo, ahora tenemos conexión con Israel, que está conectado con Róterdam por barco, en primer lugar, y después, entre otras, con la eslovena Koper por tren. Además, los rusos y los chinos están invirtiendo en la nueva Ruta de la Seda, que también conectará Europa y China por tren. Asimismo, existe una iniciativa, Cool Rail, que conecta España y Alemania (Colonia), pero Róterdam también será incluida en esta ruta a partir del año que viene".

Gigantes oceánicos y envío fluvial
Con el concepto Cool Port Rotterdam, que se ha concebido en un centro en el que encontrar todos los servicios necesarios bajo el mismo techo, se ofrecerá una central de envasado donde poder envasar el servicio conforme a los requisitos actuales de los supermercados. También se está dedicando a la gestión de bananas. Parte de la nave se adaptará para ello y dará cabida hasta a 4.000 palés en la primera fase. La capacidad total ascenderá a unos 40.000 palés. Todos los palés se almacenarán en las llamadas estanterías móviles para que se puedan retirar individualmente y, mediante números, optimizar el almacenamiento. "Todavía no hemos hablado de unas instalaciones de maduración, pero estamos construyendo cámaras de maduración para productos ready-to-eat".

El acceso al edificio será automatizado. Parte de ese proceso consiste en recibir y reconocer una señal en cuanto un camión entre en Róterdam, para que se preparen los palés adecuados dentro de los parámetros del cliente. Para el conductor, esto significa una estancia mínima en la terminal. "Para la entrega del envío, comenzaremos a trabajar en turnos entre semana para que los clientes puedan recoger sus envíos de forma mucho más fácil fuera de las horas puntas".

Bajo la influencia de buques cada vez más grandes, el acceso al Puerto de Róterdam original se ha ido complicando. Los grandes gigantes oceánicos pueden ir a Maasvlakte 1 y 2. Los puertos que miran hacia la ciudad se han designado como centros para transportes marítimos de corta distancia, con la excepción ocasional de algunos servicios de aguas profundas. Para los servicios que lleguen a Maasvlakte, Kloosterboer pondrá en marcha un servicio de barcazas que transportará continuamente contenedores desde Maasvlakte a Eemhaven.

A partir de ahora, los volúmenes grandes de bananas llegarán a Vlissingen a través de Kloosterboer. La prensa a menudo escribe sobre el tráfico de drogas a través de los puertos de Amberes y Róterdam, pero no es tanto el caso del puerto de Zelanda. "No podemos evitarlo al cien por cien, pero, por suerte, nuestros puntos están adecuadamente asegurados y tenemos una buena cooperación con aduanas".

Más información:
Kloosterboer
Marco Vermet
Fecha de publicación: