Resumen del mercado global de la cebolla
Países Bajos: ¿Qué está ocurriendo en la segunda mitad de la temporada tras el récord de exportaciones de la primera mitad?
Este año, en el mercado de exportación holandés se ha batido un récord tras otro. Desde el inicio de la temporada hasta el cambio de año, se han exportado no menos de 680.000 toneladas de cebollas holandesas, en gran parte a África. Las semanas con 35.000 toneladas exportadas no han sido la excepción. De esta forma, este pequeño país avanza hacia una cuota de exportación del 20% en el mercado mundial. La gran pregunta es dónde podrán enviar los exportadores el medio millón de toneladas restante en el segundo tramo de la temporada, tras la pérdida de los mercados africanos. La semana pasada, la demanda de Brasil fue escasa, y es un mercado que también se necesita desesperadamente para vender el gran volumen de cebollas disponible. Las diferencias cualitativas se están volviendo más pronunciadas. A diferencia de lo que ocurrió el año pasado, los precios en origen acaban de subir ligeramente y ahora se pagan de 8 a 9 céntimos por una calidad media. Es cierto que se han alcanzado precios aún mejores, pero solo en el caso de entregas programadas y producto con un calibre y un color superiores a la media, y esos lotes son minoría. No obstante, los precios de exportación siguen estando bajo presión, y las perspectivas de los envasadores y exportadores para los calibres pequeños son desalentadoras.
España: Buenos precios y gran escasez de calibres grandes
En la actualidad, hay en torno a un 15% menos de cebollas en los almacenes que en el mismo periodo del año pasado. No se han identificado problemas de calidad, pero hay una gran escasez de calibres grandes (de 90 en adelante) en el mercado abierto, ya que los programas con las cadenas de distribución se pueden cubrir sin problemas. Abundan los calibres medianos y pequeños, aunque cabe destacar que el sector español considera medios los calibres de hasta 90, que en otras partes de Europa se consideran calibres grandes. Si bien los precios para los calibres grandes se han disparado, en general, los precios de la cebolla son mejores que el año pasado porque se dispone de una cosecha significativamente menor en consecuencia de las excesivamente altas temperaturas durante los meses de verano, que provocaron bajadas de rendimiento de hasta el 30% en algunas plantaciones.
Los Países Bajos no suelen exportar cebollas a España. Y es que, de acuerdo con fuentes del sector, los holandeses están teniendo serios problemas de calidad con la cebolla almacenada por las cuantiosas lluvias de septiembre. Al parecer, esto ha provocado que los comerciantes holandeses de cebollas aceleraran sus ventas, conocedores de que, a largo plazo, la calidad no será aceptable. Además, son varios los destinos de exportación importantes para las cebollas holandesas que están cerrando sus puertas, como los mercados del oeste de África, lo que significa que tendrán que encontrar alternativas rápidamente. Los comerciantes españoles están comprando las cebollas holandesas a precios bajos, por debajo de los costes de producción españoles, tras lo cual acaban en el mercado local.
A causa de la escasez que se prevé en Países Bajos, Francia y Alemania por las mermas en almacén, los comerciantes españoles se preparan para un mercado limpio de stocks en torno a abril, lo que se traducirá en un buen mercado para las cebollas españolas tempranas. En lo referente a la exportación, se está negociando con el Mercosur para enviar producto a Latinoamérica, aunque hay países como Brasil que están tratando de proteger su producción nacional de la competencia europea.
Perú se propone exportar más cebollas dulces
El país sudamericano se ha propuesto exportar 10.200 toneladas de cebollas dulces entre agosto del año pasado y enero de 2018, un 5% con respecto a las 104.000 toneladas enviadas un año antes. Con diferencia, la mayor cuota de esa exportación, entre el 85% y el 90%, se destina a los Estados Unidos. El resto se envía a Europa y Latinoamérica. La cifra de exportación supone el 98% de la producción nacional, por lo que solo el 2% restante permanece en el mercado interno.
Brasil se prepara para el final de la temporada
En la tercera semana de enero, se registraron muchas lluvias en la región de Lebon Régis y ello mermó los cultivos. La cosecha aún continuará hasta febrero, por lo que la calidad de las cebollas que seguían entonces en la tierra podría haberse afectada. Además, los productores hablan de una mayor disponibilidad de calibres pequeños como resultado de la sequía del pasado mes de septiembre. En las semanas anteriores a los aguaceros, el precio ya era un poco más alto por la menor oferta de producto del noreste del país, por lo que la oferta total es más reducida.
Alemania: La abundante oferta hace bajar los precios
El mercado de la cebolla en Alemania es relativamente estable en estos momentos. La oferta de cebollas alemanas es abundante este año, por lo que los precios son más bien bajos. Según los comerciantes, sucede lo mismo con las importaciones de los Países Bajos. Los productos del sur de Europa y Austria, por el contrario, son muy caros desde hace varios meses.
En cuanto a la demanda, las cebollas amarillas estándares siguen siendo las más apreciadas en los supermercados. Son principalmente del calibre 40 al 70. Por otro lado, los calibres grandes con una sección transversal de más de 80 mm los demandan sobre todo la industria procesadora y los grandes compradores. Además, las chalotas y las cebollas rojas hace algunos años que tienen demanda. Hay muchos lotes variados disponibles en los supermercados que contienen cebollas amarillas, rojas y blancas, aunque las cebollas blancas continúan siendo un producto de nicho en Alemania. Los comerciantes señalan que los sacos pequeños de 1, 3 y 5 kg dominan el mercado.
Mercado tranquilo en Bélgica
Según un comerciante que trabaja principalmente con la gran distribución organizada, en la actualidad no hay mucha demanda y oferta. De hecho, el mercado está bastante tranquilo. En su opinión, se debe a la falta de frío, pues se necesita que haga tiempo de invierno para que la gente consuma cebollas. Parece que hay disponibles cebollas más que de sobra, por lo que hay más oferta que ventas. Las cebollas grandes son las más demandada, pues su volumen es limitado. Los calibres pequeños se destinan a la exportación.
El mercado francés de la cebolla "está tranquilo"
"El mercado de la cebolla está prácticamente parado", dice un comerciante describiendo la situación. Casi no hay mercado. todo el mundo pide cebollas grandes (60-80), pero estos calibres no se encuentran. Prácticamente nadie pide calibres pequeños, y son muy abundantes. Como resultado, los calibres pequeños son baratos (de 8 a 9 céntimos por kilo) y se destinan a la exportación. Las cebollas de calibre 60-80 alcanzan los 22 o 23 céntimos por kilo.
Italia ve subir los precios
En Italia se habla de que la oferta se ha reducido, pero la situación todavía no es comparable a la del mercado español. "El mercado ha cambiado con respecto a hace un mes" asegura un comerciante. "Los precios fueron dramáticos hasta noviembre". Menciona un precio de 30 céntimos por sacos de 10 kilos. A partir de diciembre, los precios subieron a unos 50 céntimos.
Los efectos del calor del pasado verano aún se están dejando notar en el mercado. Las cebollas están descoloridas a causa de las altas temperaturas. Los productores que fueron precavidos y cosecharon antes de la ola de calor, están recogiendo ahora los beneficios. En cuanto a exportación, hay demanda de España, el norte de Europa y los países árabes.
Los albaneses son grandes consumidores de cebollas
No hay cifras oficiales, pero según las estimaciones de un comerciante, en el país se producen 60.000 toneladas de cebollas. De esa cantidad, apenas se exporta nada, porque la demanda interna es excepcionalmente alta. De acuerdo con cifras oficiales, los albaneses son los segundos mayores consumidores de cebollas, por detrás de los libios, con alrededor de 33 kilos de cebolla por persona al año. "Como el consumo es tan alto, los precios se mantienen estables y bajos todo el año", dice un comerciante. Las cebollas se cultivan sobre todo en el sureste del país, donde las temperaturas son más frescas. La temporada va de finales de otoño a mediados de invierno. Se está invirtiendo en almacenes con el respaldo del Gobierno.
El sector israelí quiere competir con las importaciones
En estos momentos, los precios se sitúan en 1,14 euros el kilo para las cebollas rojas y 0,70 para las blancas, niveles normales para los meses de invierno. Puesto que el cultivo y el almacenamiento se dan todo el año, los precios son bastante estables. El grueso de la oferta proviene actualmente de los almacenes. La plantación y la cosecha no suele ser posible en los meses lluviosos, aunque se importan pequeños volúmenes de cebollas frescas. La temporada va de marzo a diciembre, pero las cebollas están disponibles todos los meses del año gracias a la capacidad de almacenaje del país.
El sector está centrando en la mejora de la calidad de las cebollas en temporada baja. La meta es poder competir con las cebollas importadas y el acento se está poniendo en los métodos de cosecha, la mejora del almacenamiento y el envasado.
EE. UU.: Escasez de calibres grandes
En estos momentos hay producción de Washington y Oregón en el mercado. En estos estados, los productores han tenido una buena cosecha y estarán en el mercado con cebollas de buena calidad hasta finales de marzo o la primera semana de abril. Oregón ha cosechado algo menos de lo habitual, pero Washington ha tenido un volumen de cosecha normal. Pese a que los comerciantes están satisfechos con la calidad hay escasez de calibres "super colossal" como resultado del frío sufrido por Washington. Por la escasez de calibres grandes, las condiciones de mercado son buenas para esta época del año. La oferta se mantiene estable y los productores del noroeste están a la espera de lo que suceda en Texas. Además, ya han llegado también las primeras cebollas importadas de México.
Sudáfrica: Menos cebollas por la sequía en el Cabo Occidental
La menor oferta de cebollas ha influido en el precio de los calibres medios, más alto que en los últimos años, al situarse en 50 rands (3,38 euros) por 10 kilos. Está previsto que el precio siga subiendo hasta el inicio de la temporada en el Cabo Occidental. Esta región ha plantado menos y se espera una reducción de los volúmenes disponibles en el mercado a partir de Pascua. Esta situación se alargará de marzo a junio. El Cabo Septentrional estará en el mercado en los dos próximos meses. Un comerciante describe la situación como un "periodo de mercado injusto".
En el Cabo Occidental, la plantación de nuevas cebollas ha decrecido drásticamente por la sequía que sufre la zona. Algunos productores señalan que han plantado de un 30% a un 50% de la superficie normal, mientras que otros todavía no han plantado nada. Los productores prefieren usar el agua para regar frutales. Hay quien espera un cambio del cultivo de la cebolla a regiones donde haya suficiente disponibilidad de agua. Un comerciante incluso se aventura a predecir que el mercado se hundirá a partir de octubre. En el panorama internacional, el precio del petróleo sigue influyendo en la demanda de cebollas. Con un precio de 70 dólares el barril, la demanda de la vecina Angola está creciendo, lo cual somete al mercado bajo presión.
Tanzania deja de exportar a Sudán del Sur
Los exportadores tanzanos de cebolla han dejado de exportar a Yuba, Sudán del sur. Les preocupa la seguridad de los transportistas en la ruta que atraviesa Kenia hasta el peligroso Sudán del Sur. Si bien es un mercado lucrativo para los exportadores, en especial para los comerciantes de Arusha, son cada vez menos los conductores dispuestos a conducir hasta el norte de Kenia y Sudán del Sur. La exportación a Mombasa, Kenia, sigue en pie.
China: La exportación de cebolla se acerca a su fin
A mediados de 2017, la oferta de Corea del Sur cayó como resultado de unas condiciones meteorológicas extremadamente secas, lo cual ofreció oportunidades a los exportadores chinos. Por un lado, las exportaciones de China se elevaron; por otro, el sector reaccionó demandando más para asegurarse de tener cebollas suficientes para más adelante.
Las exportaciones a Corea, sin embargo, bajaron en la segunda mitad del año. La causa fue el debilitamiento de la economía coreana, lo que provocó el descenso de la demanda de importación. Los exportadores tienen hasta el inicio del Año Nuevo chino (principios de febrero) para incrementar el comercio con Corea del Sur. Después, la temporada de exportación habrá acabado.
China es un gran productor de cebollas. Las zonas de producción más importantes se pueden encontrar en Shandong, Mongolia Interior y Gansu. En torno al 40-50% de las cebollas se exportan a la región del Sudeste Asiático. La mayor parte son cebollas amarillas, pues India y Pakistán ponen las condiciones en el mercado de la cebolla roja gracias a su precios más bajos.
Oceanía espera pérdidas a causa de la lluvia y la sequía
La temporada se prevé difícil en Australia y Nueva Zelanda. En este último país, los productores se han visto perjudicados por el mal tiempo, con demasiada lluvia seguida por una sequía en los últimos meses. Algunos esperan pérdidas de hasta un 15%. La cosecha va de noviembre a abril, tras lo cual comienza la campaña de exportación en enero, que se prolonga hasta mayo. El año pasado, Nueva Zelanda tuvo una buena temporada de exportación, con un aumento de hasta un 53% hasta 81,1 millones de dólares. A escala mundial, sin embargo, Oceanía sigue siendo un jugador pequeño, que representa un 3,3% del mercado.
La vecina Australia informa de precios de 2,50 dólares australianos (1,60 euros) por sacos de 10 kilos de cebollas. Es un precio decepcionante para los productores tras los precios históricos alcanzados el año pasado.