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Los comercios quieren asegurarse el suministro

España: Las primeras ventas de cítrico son hasta un 15% superiores a las de 2014

España espera una cosecha de naranja y mandarinas significativamente inferior para la campaña 2015/2016. Las altas temperaturas, por encima de 40 grados durante el período de cuajado de la fruta, sumado a las abundantes tormentas de granizo en la Comunidad Valenciana, son las responsables de que la caída en producción de naranjas se sitúe entre el 20 y 25%, siendo las más afectadas las variedades Navelina, Navel Lane y Salustiana.

También ronda el 25% la reducción de volumen de clementina y mandarina, que sube hasta el 40% en las variedades más tempranas como Iwasaki, Okitsu, Clausellina, Oronul, Marisol y Clemnrubi, entre otras.

Aunque hay muchas parcelas que han aguantado el calor y tienen mucha calidad, el campo ha sufrido muchas granizadas que han obligado a los agricultores a realizar un aclarado más a fondo. Hay mucha fruta marcada que tendrá que destinarse a segundas categorías y a industria.

“La cosecha no ha empezado, pero el mercado ya ha iniciado las compras de cítrico con mucha animación y con precios entre un 8 y un 15% superiores al inicio del ejercicio anterior”, cuenta a FreshPlaza Cristóbal Aguado, presidente de AVA-ASAJA. “Se están comprando incluso partidas de aquellas parcelas cuya calidad no les habría permitido salir al mercado en una campaña normal”, afirma.

De acuerdo con Cristóbal, “los comercios y la distribución quieren asegurarse unos volúmenes para que cuando se inicie la recolección no haya que ir a buscar la fruta cuando ya está madura. No obstante, aunque es un buen arranque de campaña, no significa que el precio vaya a ser bueno durante toda la campaña, porque depende de cómo evolucione el mercado”.

“El campo valenciano necesita reformar su estructura de propiedad”
La Comunidad Valenciana ya ha perdido casi 25.000 hectáreas de cítrico en 10 años y otras 20.000 de otros frutales, consecuencia de las malas cotizaciones. El año pasado se recuperaron unas 3.000 hectáreas de superficie agrícola, siendo 2.000 de ellas de caqui, y es que “la fuerte crisis ha llevado a muchos jóvenes a regresar al campo en busca de alguna fuente de ingresos”, explica Cristóbal Aguado, quien añade que “más tarde o temprano terminarán por abandonar por la baja rentabilidad”.

“Las explotaciones agrícolas valencianas necesitan un capítulo de inversión con fondos europeos, nacionales y autonómicos para invertir en la mejora varietal y reformar la estructura de la propiedad de la tierra para conseguir explotaciones de mayor dimensión y conseguir así más viabilidad”.

Andalucía también tendrá mermas en volumen
En Andalucía también habrá una bajada de producción por las olas de calor y por la antigüedad de muchas parcelas. Además, en las zonas productoras de cítrico andaluzas no existen los problemas de recursos hídricos que sí existen en Valencia. La tendencia en Andalucía es a cambiar la naranja por la clementina y a reducirse en general la superficie cultivada de cítricos, siendo el almendro de regadío la alternativa más elegida por los agricultores.

“La UE demuestra no estar a la altura en referencia al veto ruso”
Las consecuencias del cierre del mercado ruso se volcaron en cascada sobre todas las frutas y hortalizas, incluidos los cítricos.

En palabras de Cristóbal Aguado: “Aquello de que había que buscar mercados alternativos a Rusia y de que Bruselas nos enviaría ayudas para estabilizar los precios no ha funcionado en absoluto. La campaña fue un desastre en general, sobre todo para las naranjas. Solamente en cítricos, a los agricultores valencianos nos ha costado alrededor de 34 millones de euros. Creo que la UE no ha estado a la altura de las circunstancias. Antes de involucrarse en conflictos políticos internacionales deberían tener en cuenta a sus sectores económicos. No se han visto compensaciones económicas razonables en consecuencia del daño que han causado sus decisiones”.