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Frustrados los planes de expansión de las compañías bananeras de Filipinas

La falta de un puerto de clase mundial en las Bisayas (Filipinas) dificulta el plan de algunas compañías bananeras de expandirse en la región. Según Stephen A. Antig, director ejecutivo de la Asociación Filipina de Productores y Exportadores de Bananas (PBGEA), un puerto mundial resulta esencial, ya que es un componente principal de la producción de bananas para la exportación.

"Dos de nuestros miembros más notables querían desarrollar al menos 2.000 hectáreas, pero han señalado que no hay ningún puerto que puedan usar para llevar sus productos a los mercados internacionales", declara Antig.

Explica que las compañías esperarán al resultado de las elecciones de 2016 y a si el Gobierno nacional abogará o no por ayudar a la industria a expandirse, especialmente mediante inversiones en infraestructuras e instalaciones en regiones en las que se necesiten, como puertos en las regiones de cultivo de las Bisayas.

El año pasado, la industria, que ganó en 2014 alrededor de 1.136 millones de dólares en exportaciones, consideró la opción de expandirse a las Bisayas.

Antig declaró entonces que la organización, compuesta por las mayores compañías exportadoras y productoras de bananas del país, identificó una región contigua de 25.000 hectáreas en Bisayas Centrales que antaño había sido una plantación de caña de azúcar.

Las compañías decidieron buscar zonas de expansión después de que varios problemas azotaran a la industria, especialmente el tifón Pablo hace unos tres años, el periodo de sequía cíclico, las actividades de extorsión por parte de los rebeldes y las políticas gubernamentales que consideraban que ponían la industria en peligro.

Antig afirma que las continuas actividades de extorsión también les han obligado a seguir buscando otras regiones.

Debido a que los rebeldes queman equipamiento y amenazan a las compañías si no pagan impuestos revolucionarios, han perdido hasta un 20%, añade. "Por ejemplo, si incendian una planta de envasado, hacen falta varios meses para construir una nueva y que la compañía vuelva a conseguir una acreditación (para las instalaciones) del Departamento de Agricultura", añade.

La industria también ha sufrido el acoso de las leyes, algunas de las cuales aún son propuestas, cuyos líderes creen que podrían hacer descarrilar su crecimiento.

Fuente: mindanaotimes.net
Fecha de publicación: