Hace dos semanas, Nueva Zelanda retiró la prohibición de la importación de pimientos y tomates cultivados en Bowen (Australia), siempre y cuando sean tratados con un proceso conocido como irradiación. La exclusión de los productos de Bowen en Nueva Zelanda había estado vigente durante dos años después de que Australia prohibiera el uso de algunos productos químicos para controlar la mosca de la fruta.
La Autoridad Australiana de Plaguicidas y Medicamentos Veterinarios decidió suspender el uso de productos químicos como el dimetoato.
La ministra de Seguridad Alimentaria de Nueva Zelanda, Nikki Kaye, dice que a corto plazo la irradiación es la opción preferida para controlar la mosca de la fruta. Sin embargo, añade que considerará la importación de productos hortofrutícolas tratados con productos químicos siempre y cuando no exista riesgo de que la mosca de la fruta entre en Nueva Zelanda.
"Tendrán que aportar pruebas científicas referentes a las moscas de la fruta y el efecto que tendría sobre ellas", asevera Kaye. "Por esa razón tenemos controles de bioseguridad muy estrictos en Nueva Zelanda. Somos un país productor de alimentos, por lo que el 50 por ciento de nuestras exportaciones corresponden a alimentos. Sería una catástrofe que ocurriera [la entrada de la mosca de la fruta]".
El mercado de Nueva Zelanda tiene un valor de alrededor de 5 millones de dólares anuales para el sector hortícola de Bowen.
Fuente: abc.net.au