Mientras que el mercado de contenedores ha registrado un crecimiento medio anual del 2% en los últimos cinco años, el del transporte frigorífico ha crecido entre un 5 y un 6%. Este año, las previsiones vuelven a ser buenas. Benjamin Vicuna, director de operaciones de AC en Maersk Container Industries (MCI), nos habla de los avances que se han producido en los contenedores de atmósfera controlada (AC).
Benjamin Vicuna
El crecimiento de la categoría reefer se atribuye a los nuevos flujos comerciales. Hace veinte años, los arándanos no cruzaban océanos, según Benjamin. "Se puede decir lo mismo de las cerezas chilenas que se envían antes del Año Nuevo chino. El mercado internacional está experimentando un crecimiento enorme". A raíz de la creciente demanda mundial de otras frutas, la demanda de contenedores frigoríficos también está creciendo. En países que tradicionalmente han exportado en camión, como España y México, la demanda está aumentando ahora que están empezando a exportar a Asia.
Crece el mercado de los contenedores frigoríficos
MCI forma parte del segmento de producción de Maersk y se encarga de la construcción de los contenedores frigoríficos. Estos contenedores se suministran también a otras navieras en gran medida. "Como fabricantes de estos contenedores, conocemos bien los desafíos a los que se enfrentan nuestros clientes", dice Benjamin. "Predecimos que los contenedores frigoríficos crecerán de manera estable y también una transición del granel a la contenerización". Esta idea está respaldada por la evolución general del mercado. La edad media de los barcos frigoríficos es de 28 años y ya apenas se botan nuevos buques frigoríficos convencionales. El crecimiento medio de entre un 5 y un 6% en los últimos cinco años confirman este pronóstico.
La tecnología respalda esta tendencia creciente. La atmósfera controlada es una técnica especializada para mantener controlada la atmósfera durante el transporte. "Cada vez es más importante saber lo que le ocurre al producto", explica Benjamin. "La demanda de productos como arándanos y aguacates, que necesitan un cuidado extra para llegar con buena vida útil a destinos lejanos, es cada vez mayor. En MCI podemos proporcionar los equipamientos y los conocimientos para conservar los diferentes tipos de fruta en unas condiciones concretas".
Los datos ganan importancia
Además de la función alarma de los sensores, estos recaban una gran cantidad de información. "Se recopila mucha información. El siguiente paso es cruzar estos datos y sacar conclusiones para mejorar la calidad de los productos", indica Benjamin. Cada vez son más los comerciantes que ven las ventajas de estos datos. MCI incursionará en el mercado de la conectividad con un sistema llamado Sekstant® Global Guidance este año. Sekstant proporcionará varios servicios de valor añadido a partir de los datos operacionales transmitidos de manera inalámbrica. Las navieras podrían incluso decidir utilizarlos para hacer algo similar al Remote Container Management (RCM), el producto que actualmente se ofrece a los clientes que envían con Maersk. No obstante, los datos generados por la tecnología no solo beneficiarán a los operadores, sino que también permitirán a MCI seguir impulsando la evolución de sus productos.
El ahorro de energía impulsa el mercado reefer
La sostenibilidad es uno de los temas de la agenda del sector del transporte marítimo. Benjamin opina que MCI tiene algo que aportar: "Podemos ayudar a reducir el consumo de energía haciendo que las máquinas refrigeradoras utilicen menos energía. El concepto Star Cool se basa en un funcionamiento optimizado en cuanto a consumo energético del compresor y del circuito de refrigeración". En los próximos años, las navieras experimentarán más cambios. "Uno de los motivos más importantes de que el segmento granelero haya existido tanto tiempo son los bajos precios del combustible de los últimos años", explica Benjamin. "Está previsto que el encarecimiento del combustible y las normas de la OMI sobre el azufre que entrarán en vigor en 2020 desemboquen en una aceleración del cambio".
Las navieras tienen diferentes opciones para cumplir con las nuevas normas, que varían desde el cambio a combustibles naturales como el GNL hasta el uso de sistemas de purificación del aire. Independientemente del camino que elijan, los costes subirán. Los costes de la generación de electricidad a bordo también aumentarán. Benjamin calcula que un incremento real del 45% en los costes del combustible aumentarán el precio kWh de los buques en la misma proporción a alrededor de 0,16 dólares. "Las técnicas de refrigeración más recientes pueden ayudar a las navieras a absorber costes. Por ejemplo StarConomy, un software de control de temperatura que controla el compresor y la velocidad del ventilador. Este tipo de tecnologías no solo tienen ventajas económicas, sino también medioambientales, ya que permiten reducir la huella de carbono".
Más información:
Maersk Container Industry
Janina von Spalding
T: +453 363 19 79
E: janina.vonspalding@maersk.com
W: www.mcicontainers.com