El 73% de los españoles efectúa su compra teniendo en cuenta motivos éticos o de sostenibilidad. Respondiendo a esta demanda del consumidor actual, Bonduelle presenta su maíz "Sin residuos de pesticidas".
Los residuos de pesticidas son restos de sustancias naturales o químicas para proteger los cultivos. La garantía ‘Sin residuos de pesticidas’ significa que no se ha detectado ninguna sustancia química activa de pesticida o que la cantidad ni siquiera se puede medir (0,01 mg/kg). La empresa trabaja con laboratorios externos acreditados que garantizan un maíz sin residuos cuantificables. Con este fin, se analizan más de 500 moléculas en el maíz, haciendo que dicha garantía sea completamente transparente.
“En Bonduelle estamos comprometidos con el futuro del planeta y queremos ser el referente de la alimentación vegetal”, explica Jorge Alonso, director de Marketing de Bonduelle Ibérica. “Con el nuevo maíz ‘Sin residuos de pesticidas’, conseguimos un doble impacto positivo: una alimentación sana para el consumidor y promover una agricultura sostenible que quiere obtener lo mejor de la naturaleza”.
Desde hace más de 160 años, Bonduelle trabaja con sus socios agricultores desarrollando una agricultura responsable. Para conseguir productos como el maíz ‘Sin residuos de pesticidas’, la marca propone prácticas de cultivo respetuosas con la naturaleza.
En 1996 la empresa concluyó un contrato de abastecimiento agronómico firmado por el 96% de sus socios agricultores y renovado anualmente. De este modo, la empresa se compromete a fomentar técnicas agrícolas respetuosas con el medioambiente y ofrecer vegetales de máxima calidad.
Jorge Alonso comenta que la ambición de reducir los residuos de pesticidas forma parte de la voluntad de esta carta agronómica. Producir alimentos con esta garantía requiere implantar técnicas de cultivo alternativas como el desbroce mecánico, strip-till, control biológico, uso de mallas antiinsectos, etc., y promover nuevas prácticas como:
- el seguimiento de las plagas mediante diferentes mallas de captura para el seguimiento en tiempo real y con fiabilidad,
- el tratamiento selectivo de las plagas a través de nuevas tecnologías que traten solo la zona afectada (drones para la identificación y el tratamiento de las plagas o robots guiados por satélite para un tratamiento localizado), y
- visitas periódicas a las parcelas por parte de ingenieros agrónomos (cada dos semanas de media). En los últimos 3 años, Bonduelle ha aumentado las visitas un 20% garantizando el resultado de los cultivos.
La empresa familiar francesa fundada en 1853 tiene sede en España desde 1988. Con 130.000 hectáreas de cultivo en todo el mundo, sus verduras se comercializan en 100 países bajo diferentes marcas, canales de distribución y tecnologías. Con 54 sitios industriales y de producción agrícola propios, la empresa produce en las áreas de cultivo más adecuadas para cada producto y cercanas a sus clientes.
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Juan Manuel Dortez, responsable de comunicaciones
Bonduelle Ibérica 
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