Contra "la muerte del kiwi", un portainjerto tolerante puede ser una solución. En los últimos años, se han realizado varias pruebas en los campos y en el área de Verona se han logrado los primeros resultados positivos en las parcelas en las cuales la replantación de Hayward había fallado.
A partir del próximo año, Ceradini también podrá suministrar plantas ya injertadas, bajo pedidos hechos en esta temporada.
"Hemos logrado este resultado haciendo cambios significativos en la gestión del huerto, las prácticas agronómicas a nivel del suelo, el uso de agua y el acaballonado de las filas, pero sobre todo comenzando a usar un portainjerto desarrollado en China y comúnmente utilizado en Nueva Zelanda en los terrenos difíciles. Nosotros lo hemos renombrado SAV1, de ‘savior’, ‘salvador’ en inglés", explica Massimo Ceradini, del grupo italiano Ceradini, que alberga el vivero B&C Vivai y la empresa productora de kiwis de la marca Kingfruit.
"Una vez plantada en un área con una alta tasa de muerte del kiwi, se ha enraizado bien. La variedad Hayward, en cambio, se ha secado en pocos días". El sistema de raíces de este portainjerto es importante y se desarrolla verticalmente, una característica que hace que SAV1 sea particularmente resistente al estrés hídrico y al estancamiento, además de ser adecuado para suelos pesados y arcillosos, con tendencia a la compactación.
Convencido de las características y de los resultados obtenidos, el grupo Ceradini ha decidido diversificar la gama de plantas y producir también el SAV1.
Las fotos muestran la variedad Jintao injertada en SAV1 en la empresa Girelli Marco y kiwis cosechados por la empresa, que este año finalmente ha comenzado a producir nuevamente después de muchos intentos fallidos.
"Hemos encontrado algunos problemas con el injerto en porcentajes variables de una empresa a otra y hemos observado que la gestión del agua y los tratamientos de cultivo son fundamentales para obtener los mejores resultados. Podemos suministrar plantas injertadas a partir del invierno del próximo año, bajo reserva en este período", continúa Ceradini.
La posibilidad de comprar plantas ya injertadas ofrece enormes ventajas de gestión y reduce los riesgos técnicos asociados con la realización del injerto en campo abierto, sin mencionar el ahorro en costes de mano de obra.
La empresa Girelli Marco de la localidad de Bussolengo
"El SAV1 ha demostrado ser una oportunidad real para enfrentar el problema actual de la muerte del kiwi y ofrece a los productores un buen punto de partida para la planificación de sus plantaciones futuras", explica Ceradini.
Dentro del sector italiano de la fruta, el kiwi todavía representa uno de los pocos cultivos económicamente interesantes para las explotaciones, que están pasando momentos difíciles. La emergencia fitosanitaria que supone la enfermedad de la muerte del kiwi representa sin duda el obstáculo más complejo a superar para relanzar el cultivo de kiwi a nivel italiano.
Originada en Verona, la muerte del kiwi se está extendiendo a muchas áreas de cultivo en Italia, como Piamonte, Emilia-Romaña, Friuli, Latina y Calabria. Los síntomas de esta patología son la defoliación de la planta, bajo vigor y sobre todo muerte de las raíces.Para más información:
Massimo Ceradini
Ceradini Group
Tel.: +39 (0)45 8510268 (Italia)
[email protected]
www.ceradinigroup.com