Provence Producteur produce y comercializa ocho variedades de lechuga, entre ellas la lechuga roja, que está disponible tanto de forma ecológica como tradicional. Aunque la temporada anterior se caracterizó por un bajo consumo ante la abundante oferta, este año la tendencia parece haberse invertido: "La temporada pasada fue muy difícil para nosotros, como productores. El mercado estaba muy mal, al igual que el consumo. Por lo tanto, nos encontramos con grandes volúmenes que no tenían compradores. Este año estamos viviendo la situación contraria. Los productores han plantado menos, pero el consumo sigue ahí. Esto hace que los precios sean satisfactorios", explica Charly Rabattu, director de Provence Producteur. 
Como cada año, la temporada de lechuga roja comienza el 15 de octubre y termina a finales de abril. "Empezamos la campaña en un momento en que la oferta de otras zonas de producción se está agotando. En invierno, por encima de Montélimar, sobre todo en Isla de Francia, es más difícil producir lechugas. Mientras que en la Provenza el clima es más suave y nos beneficiamos del viento mistral, que limpia los cultivos. Esto nos permite ofrecer nuestras lechugas para la exportación a países como Inglaterra, Alemania y Suiza, donde la producción de lechuga de invierno es también más limitada".
Además de estos 7 millones de cabezas de lechuga de todas las variedades, Provence Producteur también cultiva calabaza y brócoli. En Francia y para la exportación, la empresa ofrece su producción con la certificación ecológica, Global Gap, GRASP, AVM e IFS a minoristas y a la gran distribución.
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Charly Rabattu
Provence Producteur
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