Los principales participantes de los sectores de la exportación y la importación están trabajando para identificar soluciones a los problemas logísticos que han hecho subir los precios de los alimentos en todo el mundo y han afectado gravemente a Chile y a sus socios comerciales mundiales. Ya se han realizado importantes avances, ya que se han celebrado reuniones con los Ministerios de Transporte y Economía. Este tipo de coordinación entre los sectores público y privado no tiene precedentes en Chile.
Partes claves, como la Cámara Nacional de Comercio (CNC), la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (Conadecus), el Consejo Exportador de Alimentos, la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (ASOEX), la Federación de Productores de Frutas de Chile (Fedefruta) y los operadores logísticos portuarios, están trabajando con transportistas, conductores y trabajadores de los puertos de Valparaíso y San Antonio. Han expresado su intención de ayudar a evaluar y definir las medidas que deben aplicarse para desenredar los problemas logísticos que afronta Chile.
Se ha reconocido que, aunque los problemas logísticos se han agravado debido a la pandemia y a la guerra entre Rusia y Ucrania, la solución nacional al problema pasa por tomar medidas de corto y mediano plazo para mejorar la eficiencia de los puertos chilenos, resolver la escasez de trabajadores en toda la cadena logística y encontrar una forma de mitigar el alza de las tarifas de transporte, entre otros temas.
Una de las medidas que se barajan es la habilitación del Puerto de Ventanas para recibir buques de carga. Otras medidas son dar prioridad a los alimentos y suministros estratégicos en las operaciones portuarias, habilitar naves con cámara en las terminales de Valparaíso y Coquimbo y en los puertos de la Octava Región, y modificar las restricciones de altura de ola en el puerto de San Antonio, lo que facilitaría la llegada y salida de más buques.
El presidente de Conadecus, Hernán Calderón, estimó que "la grave crisis logística, que afecta a todo el país, pone en riesgo los precios de los alimentos y bienes de primera necesidad, afectando a toda la población en un contexto inflacionario que es alarmante y donde se requieren soluciones urgentes para proteger a los más necesitados".
El presidente de ASOEX, Ronald Bown, afirmó que "la pérdida de fruta y la incertidumbre generada por la imposibilidad de que la fruta llegue a tiempo a los clientes internacionales está generando una crisis que afecta a la imagen de Chile como principal proveedor mundial".
Claudio Cilveti, presidente del Consejo Exportador de Alimentos, destacó la necesidad de fortalecer la cadena logística para la recuperación del sector exportador. "Hay que poner en marcha un modelo de gestión sólido para cumplir con los compromisos con los países de destino, estimular el comercio exterior, promover la producción y aumentar la oferta de productos, promoviendo así el crecimiento del empleo y la economía del país en el momento en que más se necesita", agregó.
Por último, Ricardo Mewes, presidente de la CNC, destacó que "el incremento en los costes de los combustibles, junto con las alteraciones en las rutas y la capacidad de transporte marítimo, ejerce una mayor presión sobre las tarifas de los fletes, lo que ha impactado en el coste de las importaciones".
Para más información:
Karen Brux
Chilean Fresh Fruit Association
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