El inicio de la temporada de batatas en Egipto ha sido bastante lento. La demanda está ahí, pero es menor de lo que podría ser. Uno de los retos para los productores egipcios será el aumento de los costes de cultivo, así como el incremento de las tarifas de envío.
Según Nora Mohamed, directora de ventas comerciales de Skyline for Import & Export, la temporada de batatas egipcias ha tenido un comienzo lento. La situación actual de los precios también es bastante delicada. "La temporada egipcia de batatas 2022 comenzó sin retrasos en agosto. Al principio solo había pequeños volúmenes disponibles, pero la oferta ha aumentado gradualmente. La demanda es bastante lenta en estos momentos, además de los costes más elevados de lo habitual en la exportación de batatas. Tanto los proveedores como los clientes están llevando cuidado de no inundar el mercado con productos, lo que haría que los precios bajaran lo suficiente como para no cubrir los crecientes costes".
"En general, las batatas egipcias tienen buena reputación y suele haber una demanda estable, como se ha visto en las últimas temporadas. Sobre todo cuando los costes son bajos en comparación con otras variedades de diferentes países. Los productores y exportadores egipcios han hecho un gran esfuerzo por mejorar la calidad de las batatas", explica Mohamed.
Sin embargo, la inflación está provocando un gran aumento de los costes, lo que a la larga podría repercutir en los márgenes de beneficio de los exportadores egipcios. "La inflación en Europa, así como en Egipto, ha afectado a todo el comercio, no solo a las batatas. Hay mucha incertidumbre, costes elevados, tarifas de transporte cada vez más altas, además de que el euro pierde valor frente al dólar, algo que no se veía desde la creación de la moneda en 2002. Todo ello repercute tanto en los costes como en las pautas de consumo".
Teniendo en cuenta estos riesgos, tanto los importadores como los exportadores se lo toman con calma, sin que nadie intente adelantarse. "La demanda parece algo normal hasta ahora en comparación con años anteriores en los países europeos, especialmente en el Reino Unido y los Países Bajos, que son los principales importadores de batatas egipcias.
"Sin embargo, la sensación es que todo el mundo es más cauteloso; no hay que presionar, no hay que precipitarse. Ese es el lema tanto de los exportadores como de los importadores para esta temporada. Es difícil anticiparse a los retos que puedan surgir ante la siempre cambiante e inesperada actualidad. Sin embargo, se espera que no haya grandes cambios de cara al resto de la temporada", concluye Mohamed.
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Nora Mohamed
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